Hay pequeñas conductas que trazan una línea entre tu carrera y lo que quieres en tu vida, una vez que las cruzas, corres el riesgo de arrepentirte seriamente en el futuro.     Cada día nos enfrentamos a decisiones que afectan nuestra carrera: Qué estudiar, a qué empresa pedir trabajo, qué idiomas o habilidades se deben cultivar, cambiar de empleo, aceptar un ascenso. Sin embargo, hay decisiones que son menos cruciales pero determinan tu modo de vida en el largo plazo. Un artículo escrito por el consultor de management Bernard Marr en alianza con LinkedIn y el Foro Económico Mundial, enumera algunas decisiones de carrera que hacen que cruces la línea entre tu trabajo y lo que realmente aprecias en la vida, toma nota.     1. Pretender ser alguien que no eres ¿Qué tan dañino puede ser pretender que eres un fanático de los deportes sólo porque a tu jefe le encantan? Todo puede empezar con una mentira piadosa para encajar en ciertos círculos, sin embargo, con el paso del tiempo puedes sorprenderte a ti mismo callando tus opiniones por temor a ser excluido, Bernard Marr afirma que, a la larga, pretender algún interés genera una sensación profunda de vacío. 2. Tomar decisiones basadas en el dinero Nunca es buena idea tomar una decisión laboral sólo por el dinero. Es un factor importante, sin duda, sin embargo, lo primero que debes analizar antes de cambiar de empleo o tomar un ascenso es cómo te sentirás. 3. Creer que puedes cambiar algo relacionado con tu trabajo El foco de alerta se enciende cuando piensas: “este sería el trabajo perfecto si sólo…” Tú no eres responsable por las fallas sistémicas en tu área de trabajo. Evita pensar que puedes cambiar el departamento administrativo si tú perteneces al área creativa. 4. Conformarte Un trabajo ‘pasable’, con un salario ‘pasable’ y prestaciones ‘pasables’ no debe ser suficiente. Al conformarte en un lugar en el que no estás a gusto pone en duda tu confianza en ti mismo. 5. Trabajar 50, 60 u 80 horas a la semana Quizá piensas que eso es lo que se espera de ti porque eres jefe, porque tuviste un aumento o porque quieres un puesto mejor. Sin embargo, ni tu cuerpo ni tu vida personal agradecen tremendo sacrificio. 6. Poner al último a tus amigos o a tu familia Alguien exitoso siempre está rodeado de una red de protección, personas que lo apoyan y lo quieren más allá de sus compañeros de trabajo o empleados. Esos amigos cercanos, la familia deben ser prioridad para tener a alguien que te considere a ti como su prioridad. 7. Tratar de controlarlo todo No sólo hay que evitar ser un ‘mandón’ con los amigos o los compañeros de trabajo, no todo en la vida va a salir como lo deseamos, a veces sólo hay que dejar que las cosas pasen. 8. Nunca equivocarte Si siempre estás evitando cometer errores, entonces nunca tomarás riesgos. El punto focal es establecer un status quo entre lo que se logra y lo que se fracasa, tomar riesgos, cometer errores y aprender de ellos. 9. Pensar sólo en ti La mejor estrategia para aprovechar oportunidades personales es ayudar a otros a superarse. Si siempre antepones tus necesidades te verás solo en poco tiempo. 10. No valorar tu propia felicidad La gente regularmente piensa que puede posponer su felicidad, pero esos momentos de felicidad nunca llegan. Priorizar tu felicidad es una decisión imperativa, a veces implica cambiar de trabajo, pero a veces sólo implica disfrutar aquel que ya tienes.

 

Siguientes artículos

¿Puedes pagarle a tus empleados para innovar?
Por

Spoiler: Sí. Pero depende de cómo lo hagas. Una nueva investigación revela que los bonos y los aumentos de sueldo por sí...