Aprueba INE presupuesto de 5,356 mdp para partidos en 2015

El monto es inferior a lo que Presidencia ha gastado en publicidad en 2014 según el senador Alejandro Encinas. El partido que más recursos recibirá este año será el PRI con 1,376 mdp, seguido del PAN, con 1,158 mdp, y del PRD, con 886 mdp.   El Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) aprobó que los 10 partidos políticos nacionales reciban un monto global de 5,356 millones de pesos (mdp) durante el año en curso. En un comunicado, el Senador Alejandro Encinas expone que el monto cubre el desarrollo de actividades permanentes ordinarias. Los partidos políticos recibirán un total 3,909 mdp para actividades permanentes ordinarias; para gastos de campaña, 1,172 mdp y para actividades específicas 117 mdp. Además, para franquicias postales y telegráficas contarán con una bolsa de 156 mdp. El partido que más recursos recibirá este año será el gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), con 1,376 mdp, seguido del Partido Acción Nacional (PAN), con 1,158 mdp, y del Partido de la Revolución Democrática (PRD), con 886 mdp. El senador Alejandro Encinas refirió que el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto tiene un gasto millonario en propaganda equivalente a un promedio de 6.3 millones de pesos diarios. El legislador aseguró que en 2013, el gobierno de Peña Nieto reportó un gasto de 485.6 mdp en los primeros 10 meses del año; para el 2014 la partida se elevó, pues en el mismo lapso, el gobierno federal gastó  1,908 mdp en publicidad, casi cuatro veces más de lo desembolsado en 2013, según el reporte de la Ejecución de los Programas y las Campañas Gubernamentales. Los gobiernos federal y estatales destinan cerca de 12,000 mdp anuales a publicidad, así lo muestra el informe divulgado por el Centro de Investigación y Análisis, Fundar en el que se advierte sobre la “censura oficial indirecta”, mecanismo que consiste en presionar para influir en la cobertura de noticias y modular el panorama mediático o las líneas editoriales de los medios, a través de una asignación sesgada y opaca de la publicidad gubernamental.