Nuevos ingredientes, tecnologías futuristas y un sinfín de experimentos. La carrera por encontrar el elíxir de la eterna juventud se ha convertido en una competencia científica que promete lo que todos deseamos: dominar el tiempo.   Por Raquel Azpíroz y Cristina Rey   ¿Estamos disfrutando de horas extra? Puede ser. Gracias a la ciencia el hombre ha desafiado varios pronósticos y los logros ya conquistados despiertan sed por nuevos retos, pues aumentar la expectativa de vida no ha sido suficiente: optimizar su calidad y resistir al envejecimiento, disminuir los signos del paso del tiempo y el daño que el mundo mo­derno infringe a la piel. Las recetas antiguas para potenciar la belleza siguen vigentes, pero hoy la cosmética va más allá: manipula la naturaleza, emula sus mecanismos de regeneración y los convierte en información transferible a las células de la piel. Alrededor de esta tesis gira el desarrollo de nuevas tecnologías en las fórmulas más novedosas. La alta cosmé­tica es un verdadero lujo, pero no uno que se define por tendencias o por mera mercadotecnia. Los altos precios de las fórmulas toman su valor de los años de investigación.   I+D+I: investigación, desarrollo e innovación En la cúspide de la innovación está una de las firmas que cambió para siempre el curso de la biotecnología cosméti­ca. En 1978, La Prairie fue pionera en aplicar la investiga­ción celular al campo de las fórmulas antiedad. El resultado fue su extraordinario Complejo Celular —extracto de raíz de ginseng, extracto de cola de caballo y glicoproteínas— que promueve la producción natural de células sanas y previene los signos del envejecimiento. A partir de este descubrimiento, la casa suiza no ha dejado de innovar: oro coloidal para dar vitalidad y salud a la piel, o incorporar extracto de caviar en una base de maquillaje. Además, ostenta la primicia de usar el poder regenerativo del mar en su colección más icónica de extracto de caviar. Este año, Skin Caviar Luxe Sleep Mask y Skin Caviar Luxe Soufflé Body Cream demues­tran la infatigable búsqueda de perfección. Al respecto, el Dr. Daniel Stangl, director de Innovación de La Prairie, nos comparte el descubrimiento del betaglucano hidro­lizado presente en sus nuevos productos: “A medida que las células envejecen, varias de sus actividades decrecen, impactando en el mecanismo de síntesis de la proteína progerina. Hemos incorporado un innovador extracto de alga que actúa disminuyendo la producción de progerina en las células y ayu­da a preservar los tejidos del envejecimiento acelerado. El glucano es producido por una cepa exótica de Martinica, encontrada en un suelo sujeto a un extremo estrés hídrico. Esta especie produce un exopolisacárido, que es selectivamente hidrolizado para obtener el betaglucano que reestructura naturalmente la piel, repara la barrera cutánea y minimiza la pérdida de agua a través de la estimulación de la síntesis de la filagrina, una proteína esencial del estrato córneo y precursora de la humectación natural de la piel”. Los tiempos cambian y la dermis requiere nuevos cuidados, por ello es imprescindible incluir ingredientes efectivos, formulaciones innovadoras y la tecnología más revoluciona­ria disponible para el cuidado de la piel. “La biotecnología es cada vez más importante. Ahora usamos tecnologías de células madre vegetales para obtener óptimas concentra­ciones de ingredientes activos específicos. En términos de eficacia, mejoramos la transmi­sión especializada de ingredientes activos a células específicas de la piel con el uso de tecnologías innovadoras de encapsulación”, puntualiza Daniel. Cuando le preguntamos sobre sus próximos retos en La Prairie, afirma que los lanzamientos de este año que comienza sorprenderán y deleitarán a los consumidores. Y revela a Forbes México: “Durante la primera mitad del año introduci­remos dos nuevos fortificadores que retrasan la edad y que, en verdad, rendirán homenaje a las raíces de la firma”.   Ellos y ellas Todas las pieles son diferentes, y más si le añadimos el adjetivo masculino o femenino. “La del hombre es más gruesa porque es más rica en fibras de colágeno y está más hidra­tada, ya que produce más sebum y es más firme que la de las mujeres. Además, tiene un pH más ácido y está más vascularizada. Pero hay que destacar la presencia de barba, que obliga a un afeitado diario produciendo una agresión continua y sistemática a la dermis”, nos comparte José Ginestar, director de Investigación y Desarrollo de Sisley. Para diseñar un nuevo serum hay que co­nocer en profundidad el comportamiento de la piel, las células y los procesos biológicos. “Descubrimos nuevos mecanismos gracias a colaboraciones entre nuestros equipos de investigadores. Dar respuesta de una forma más eficaz es lo que justifica que desarrolle­mos un nuevo producto. Éste debe responder a un problema nuevo y ser mejor que el anterior, y esto no es algo que ocurra todos los días”, afirma Ginestar. Sisley centra los próximos lanzamientos en el campo de los productos solares y anticelulíticos. “Podemos sorprender con un nuevo ángulo de investi­gación en ambos tipos de productos”, y nos comenta que las piedras preciosas también se lucen en cuellos y manos. “Hemos estudiado una nueva piedra semipreciosa, la olivina, por su aporte y riqueza en magnesio. Gracias a una técnica de extracción específica ha sido posible mejorar su biodisponibilidad para las células de la piel”. El lujo ya no sólo se porta y exhibe, ahora también se absorbe. cosmeticos1

 

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