¿Cómo pueden las empresas encarar una estrategia de crecimiento cuando las cartas les juegan en su contra? La empresa debe modificar sus prácticas, eliminar la complejidad del negocio y de la información, entre otras cosas. Aquí algunas directrices.   Por Karen de la Torre, Vicepresidente Oracle Corporation   Introducción Es evidente que las empresas multinacionales que dependen de prácticamente todas las economías desarrolladas y en desarrollo tendrán que crecer acostumbrándose a las nuevas dinámicas del mercado en las que el crecimiento es lento o precario y las oportunidades de expansión son pocas y arriesgadas. Entonces, ¿cómo pueden las empresas encarar una estrategia de crecimiento cuando las cartas les juegan en su contra? Parte de la solución radica en la resolución de la empresa de modificar sus prácticas, de eliminar la complejidad del negocio y de la información, de incorporar procesos más ágiles, de reforzar la lealtad de los clientes y a la marca, y de tomar decisiones arriesgadas más inteligentes sobre las oportunidades de inversión y crecimiento que salvaguarden su posición a largo plazo.   Reducir la complejidad del negocio La eliminación de la complejidad del negocio es un desafío constante para la mayoría de las organizaciones, pero la claridad de objetivos y las iniciativas que contribuyen a la aplicación de la estrategia deberían estar muy arriba en la lista de prioridades. Dos desarrollos que han tenido un éxito notable en la reducción de la complejidad y en sentar las bases para un crecimiento a largo plazo son los servicios compartidos y la nube. Los servicios compartidos permiten que procesos y prácticas diversos de toda la organización se estandaricen y se elimine el exceso de personal. La introducción de la computación en la nube en el entorno de los sistemas no solo ahorra dinero sino también impulsa la agilidad de la empresa, proporcionando a las organizaciones el margen tan necesario para responder de manera flexible y rápida a las nuevas oportunidades del mercado. Primordial para la capacidad de respuesta de una organización es la calidad de su información de gestión y su capacidad de capturar y comunicar una combinación saludable de indicadores adelantados y retrasados que puedan proporcionar más visibilidad sobre las posibilidades de éxito. Mediante el uso de paneles y cuadros de mandos en el mismo entorno de rendimiento, una organización puede fomentar una mejor adecuación estratégica y análisis de operaciones, y dotar de mucha más confianza a los planes a largo plazo y la sostenibilidad.   Mejorar el proceso de previsiones También es importante aumentar la frecuencia de las previsiones —“comprobando constantemente la temperatura del agua”, formulando escenarios, evaluando riesgos y asignando probabilidades. En este contexto, se considera que las previsiones acumuladas proporcionan una exactitud óptima para las empresas que se enfrentan a un cambio constante. Sin embargo, fomentar el crecimiento sostenible significa tanto aumentar los ingresos como reducir los costos. Los clientes pueden ser volubles, y en muchos sectores Internet y la globalización ha aumentado la competencia y ha bajado las barreras de acceso. La retención de clientes es esencial para el crecimiento a largo plazo, pero ¿tienen las organizaciones un conocimiento suficiente de sus clientes, como su grado de satisfacción y la probabilidad de que compren en el futuro?   Aprovechar la analítica social La creciente influencia de los medios sociales y su capacidad de persuadir o disuadir a los clientes de comprar presenta una oportunidad enorme. Medir el “sentimiento” para evaluar la fidelidad a la marca, la retención de clientes e incluso las previsiones de ventas se ha convertido en una herramienta esencial. La analítica de medios sociales ofrece un inmenso potencial para conocer los hábitos de los clientes y garantizar relaciones a largo plazo y, mediante la extrapolación, el crecimiento social, ayudado por el análisis de CRM que puede proporcionar un conocimiento más detallado de los hábitos, gustos y aversiones de los clientes. Por último, a pesar del sombrío entorno comercial internacional, hay economías resurgentes y focos de actividad del mercado que ofrecen una rentabilidad superior. El problema es que esos nuevos mercados y adquisiciones suelen venir acompañados de un mayor riesgo. Las técnicas de modelado pueden proporcionar previsiones y procesos de planificación más avanzados que aprovechen las técnicas matemáticas para definir expectativas más realistas sobre el abanico de resultados posibles y para incorporar la ponderación de los riesgos en el proceso de evaluación de la inversión. Las medidas de mitigación de riesgos y los indicadores clave de rendimiento (KRI) incorporados en las previsiones ayudan a garantizar que las organizaciones no eludan las estrategias de crecimiento, sino que busquen el equilibrio correcto entre su tolerancia al riesgo y las nuevas oportunidades. El crecimiento sostenible es, contra todo pronóstico, difícil de conseguir y la evidencia muestra que muy pocas empresas, probablemente menos del 20 por ciento, son capaces de impulsar al crecimiento de manera uniforme de una década a otra. Pero las nuevas tecnologías y técnicas están ayudando a poner orden y a simplificar los procesos para que las empresas puedan dedicar más energía a actividades de valor añadido (como reforzar la fidelidad de los clientes) que contribuyan al éxito a largo plazo. El crecimiento sostenible también consiste en buscar nuevos mercados, valorando lo que hay en el horizonte y asumiendo un enfoque basado en el riesgo para evaluar las oportunidades que pueden proporcionar probabilidades de crecimiento futuro por encima de la media.   *Este texto fue escrito por Oracle Corporation para ser publicado en Forbes Advertorial. Su contenido es de orientación comercial y es independiente de la línea editorial de Forbes México.