Cadillac quiere fabricar un modelo de 250,000 dólares

Aunque por ahora lucha por competir en el rango de precio de los 40,000 a 50,000 dólares, el nuevo presidente de la compañía, Johann de Nysschen, quiere estar en el mercado de lujo para 2015.   Por Joann Muller   Si vas a soñar, sueña en grande. El nuevo presidente de Cadillac, Johann de Nysschen, imagina un coche de ultralujo de 250,000 dólares en la sala de exposición de la marca, una perspectiva que parece difícil de entender para un fabricante de automóviles que sigue luchando por encontrar su equilibrio entre los rivales europeos en la gama de precio de 40,000 a 50,000 dólares. Pero De Nysschen, ex presidente de Audi e Infiniti, dice que, con el tiempo, eso podría suceder. “Hoy es demasiado pronto para un Cadillac de 250,000 dólares, pero en 15 años no lo será”, dijo en una entrevista en el Los Angeles Auto Show. “Tenemos que ganarnos ese valor.” En sus primeros tres meses en el puesto más alto de Cadillac, De Nysschen ya ha hecho algunos grandes movimientos: un plan para trasladar la sede de la marca a Nueva York y una nueva estrategia de nomenclatura para su línea de modelos, con letras y números, al igual que las marcas de lujo europeas. En el show de Los Ángeles dio a conocer las versiones de alto desempeño sedán y coupé del ATS-V, que competirá con la serie 3 de BMW M deportiva. Esos autos se ofrecen con una transmisión manual de seis velocidades, que incluye una nueva característica que Cadillac llama “cambio sin levantamiento”. Los conductores serán capaces de mantener su pie sobre el pedal en vez de sacar el acelerador para cambiar de velocidad. Es una buena metáfora para el plan de General Motors para Cadillac. En la entrevista, De Nysschen esbozó un bombardeo de productos que podrían más que duplicar el tamaño de la línea Cadillac para el 2020, lo que podría añadir al menos otros tres automóviles y tres camionetas. Iniciará con el sedán CT6, que saldrá a la venta el próximo año. Competirá con versiones de corta distancia entre ejes como el BMW Serie 7, el Audi A8 y la clase S de Mercedes. Pero De Nysschen señaló que la mayor parte de las ventas de los modelos europeos son modelos con una mayor distancia entre ejes, lo que crea espacio para que Cadillac añada un modelo más grande, de gama más alta, que vendería “muy por encima de los 100,000 dólares”. Lo llamó un coche insignia de bajo volumen que no necesariamente sería rentable, pero generaría un poder de fijación de precios para el resto de la línea Cadillac. En los viejos días, señaló, GM no fabricaría un vehículo de este tipo si el modelo de negocio no garantizara ganancias. “El libro de jugadas del lujo es distinto. Algunos coches hacen dinero. Otros hacen volumen. Algunos coches generan imagen.” Cadillac también necesita un nuevo modelo de nivel de entrada, debajo del ATS, para competir con el nuevo Mercedes CLA y el Audi A3, modelos de 30,000 dólares que están atrayendo a compradores aspiracionales a esas marcas. De Nysschen añadió: “Hay algo mal cuando una marca de lujo estadounidense tiene sólo un crossover y una SUV, y los alemanes tienen tantos que no puedes llevar la cuenta.”  Le gustaría añadir un SUV de gran tamaño entre la Escalade, el tope de gama existente de Cadillac y la SRX tamaño medio, así como un modelo compacto para competir con los más vendidos de la categoría, como el Audi Q5 y el BMW X3, así como un subcompacto como el Q3 de Audi y BMW X1. Es una larga lista de necesidades que requerirán una inversión de alrededor de 2,500 millones de dólares, pero De Nysschen dice que tiene el apoyo de la presidenta ejecutiva de GM, Mary Barra, y del presidente, Daniel Amman. “Tendrán que pasar 10 años antes de que veamos un cambio significativo”, dijo. “Será a la mitad de la próxima década cuando la gente comience a mencionar a Cadillac entre los principales fabricantes de lujo del mundo.” Lo más importante, dijo, es que Cadillac se apegue a sus convicciones y no recurra a la reducción de precios como una forma de vender más unidades.