Detroit presentó este jueves una declaratoria de bancarrota municipal, se trata de la más grande quiebra local en la historia de Estados Unidos.   Conocida como la cuna de la industria automotriz, Detroit prepara el terreno para una batalla legal costosa con los acreedores. De ser aprobada la solicitud de bancarrota, los acreedores del gobierno local deberán lidiar con una reestructura por 18,500 millones de dólares que ha paralizado a la ciudad más grande en Michigan. Las pensiones de jubilación y los servicios de salud de miles de trabajadores de la ciudad están en juego. El gobernador de Michigan Rick Snyder dijo que había aprobado la solicitud de acogimiento al Capítulo 9 de la protección por bancarrota señalando que “Detroit simplemente no puede aumentar los ingresos suficientes para cumplir con sus obligaciones actuales, y que es una situación que sólo se proyecta a empeorar en ausencia de una declaración de quiebra “. “Mientras que los líderes de la planta en Michigan y los acreedores de la ciudad entienden que deben encontrar una solución al problema financiero serio de Detroit, nos mantenemos comprometidos a continuar nuestra fuerte asociación con Detroit …”, dijo el portavoz de la Casa Blanca, Amy Brundage. Reportes de Reuters arrojan que, como consecuencia de la mala situación económica los índices de delincuencia en la ciudad han aumentado, la tasa de homicidios se ubica su más alto rango en casi 40 años, y sólo un tercio de sus ambulancias presaron servicios en el primer trimestre de 2013, además, se contabilizan 78,000 edificios abandonados. General Motors, el único gran fabricante de automóviles de Estados Unidos con sede en Detroit, dijo en un comunicado que la empresa “está orgulloso de llamar a Detroit a casa y … (esto es) un día que nosotros y otros no esperábamos que vendría. Creemos, sin embargo, que hoy en día también se puede marcar un inicio limpio para la ciudad”. Ford Motor Co, que tiene su sede en el suburbio de Detroit Dearborn, dijo que era “optimista de que los líderes gubernamentales tendrán éxito en el fortalecimiento de la comunidad.” Pero Ed McNeil, jefe negociador de una coalición de 33 sindicatos que representan a la mayoría de los trabajadores de los servicios para la ciudad de Detroit, dijo la declaración de quiebra era de “reventar los sindicatos.” En los mercados, los bonos de Detroit con vencimiento al 15 de junio de 2035 cotizaron a 38.5 dólares con un rendimiento de 16%, una caída brutal comparado con los 76 dólares a los que se comercializaron en mayo a una tasa de 8.39%. Con información de Reuters  

 

Siguientes artículos

Portugal supera moción de confianza; aun no se supera la crisis
Por

La crisis está lejos de terminar, ya que las negociaciones de emergencia siguen adelante entre los tres principales part...