Acusan que Coca-Cola, Pepsico y Nestlé violan normas de publicidad para niños en México

Empresas de la industria de bebidas como Coca-Cola, Pepsico y Nestlé violan el compromiso internacional que generaron con la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2008 de no realizar publicidad a menores de 12 años, al tiempo en que fomentan el consumo de bebidas azucaradas, indicó la Alianza por la Salud Alimentaria, un conjunto de asociaciones civiles que buscan erradicar la obesidad en el país. En conferencia de prensa, Fiorella Espinosa, coordinadora de salud de El Poder del Consumidor, indicó que para atraer a los niños, las empresas utilizan publicidad con personajes ficticios o reales de películas o de la marca. Internet y los empaques resultan un importante medio para la promoción de bebidas azucaradas, ya que la gran mayoría muestra un elemento atractivo para los niños. Esta tarde, Coca-Cola, a través de Marcela Hernández, senior associate de Burson Marsteller, aseguró a Forbes que la empresa cumple con la normatividad a escala global y en México con la política de Mercadotecnia Responsable en línea con el Código de Autorregulación de Publicidad de Alimentos y Bebidas no Alcohólicas dirigidas al Público Infantil (PABI). “Por lo anterior, no dirigimos publicidad a niños menores de 12 años ni se trasmite en programas infantiles. Es importante destacar que cumplimos los lineamientos del CÓDIGO PABI, auditado por Media Auditors”, respondió Coca-Cola a las declaraciones de El Poder del Consumidor. “Adicionalmente, hay pleno cumplimiento de los lineamientos y criterios nutrimentales y de publicidad que deben observar los anunciantes de alimentos y bebidas no alcohólicas establecidos en el Reglamento de la Ley General de Salud en Materia de Publicidad”. Lee también: Pokémon Go puede ser la cura para la obesidad Durante la conferencia de prensa, Fiorello Espinosa advirtió que la publicidad afecta las preferencias de los niños y aumenta los riesgos de obesidad. “Un inicio temprano en el consumo de bebidas azucaradas, como lo tiene gran parte de los niños menores de dos años, se asocia con una mayor acumulación de grasa abdominal y obesidad”, señaló la representante de El Poder del Consumidor. Por lo anterior, la organización recomendó ampliar la actual regulación de promoción de bebidas azucaradas y alimentos para niños, y extender hasta las 22 horas el horario de restricción de la publicidad que también se transmite en televisión. Afirmó que es necesario regular el uso de herramientas como regalos, juegos y todo tipo de elemento que llame la atención del público infantil. Lee también:  Impuesto a refrescos recaudó 50,000 mdp sin reducir el consumo La especialista añadió que es necesario evitar publicidad de bebidas endulzadas en espacios de reunión de los infantes como son el Papalote Museo del Niño, La Feria, Kidzania y zoológicos. De acuerdo con un estudio realizado por la Alianza en la Ciudad de México durante el mes de mayo, se encontraron 140 registros publicitarios dirigidos a los niños, principalmente de refrescos con el 46% de los anuncios, seguido por jugos y néctares con el 16% y el resto de productos como aguas saborizadas, polvo para preparar, leches de sabor entre otros. En refrescos, las marcas principales encontradas fueron Coca-Cola, Fanta, Dr. Pepper y Pepsi. Se tomaron en cuenta diversos medios como redes sociales y sitios web, al igual que los empaques de los productos, así como los espacios de encuentro de niños como son las ferias y museos infantiles. De igual manera, las empresas utilizan promociones de obsequios, concursos y ofertas como precios especiales por paquete con varias unidades individuales, ofertas en el costo , regalos en la compra del producto y concursos para obtener premios y viajes. “En puntos de venta, como supermercados, tiendas de abarrotes y de conveniencia se identificaron siete registros publicitarios. La publicidad y promociones se mostraron a través de carteles o anuncios ubicados en el interior y exterior de los establecimientos”, indica el estudio. En México, el sobrepeso y la obesidad afecta a 34.4% de la población entre 5 y 11 años de edad, y a aproximadamente el 35% de personas de entre 12 y 19 años. Ello coloca al país por encima del promedio de las naciones perteneciente a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).