Por razones difíciles de explicar, la gente que vive curiosa y creativa es más feliz y vive más años o, por lo menos, el tiempo que vive lo utiliza mejor. Ésta es la lección de Carlos Glatt, el protagonista de esta historia.
Hoy es un día en que escribiré un caso de mi vida, en el que yo mismo me involucré por la forma cómo se dieron las cosas. Hace un año me pidieron que llevara a Ed Renci, quien fue el CEO global de McDonald’s, a dar una conferencia al Foro Mundial de Recursos Humanos, que se realiza cada año en Monterrey.
Previo a la conferencia subió al escenario
Carlos Glatt, un conferenciante desconocido para mí, he de reconocerlo, y escuché su participación sobre la
creatividad y la innovación. Fue una gran sorpresa encontrarme con un hombre apasionado por lo que hace y experto en este tema, por lo que de inmediato lo invité a formar parte de Speakersmexico.com
Unos meses después, ambos nos dimos la oportunidad de sentarnos a platicar para que me explicara qué hacía y por mi parte explicarle cómo funciona la agencia y la venta de conferencias.
Encontramos oportunidades diferenciadoras que nos dieron la seguridad de que sería un buen negocio para ambos, tanto así que un día le comenté que debía de escribir un libro sobre esta forma inteligente de descubrir y aplicar la innovación que tiene Carlos: a los 90 días —el 20 de marzo de 2013— ya lo tenía listo para llevarlo a la imprenta y junto con ese texto nació Speakers Editores, que es quien edita el libro de Carlos Glatt:
GIRO DE 720 Grados
Hoy, ya con más de 4,000 libros en venta en conferencias y librerías, sigue siendo un documento que yo estoy convencido de que…
… el libro es una herramienta obligada de continuidad para quien escucha sus conferencias empresariales. Leer su libro es y debe de ser un hábito constante para quien se dice curioso, creativo y con ello se atreve a innovar.
Dejaré de hablar de esta historia de amistad y negocio con Carlos para platicarles un poco de cómo piensa, describe y comunica lo que para él es su vida diaria. Estoy seguro de que muchos lectores encontrarán una nueva forma de innovar en sus vidas, negocios y, como dice Carlos, descubrir LA FELICIDAD.
Le pregunto a Carlos que me defina lo que para él es la curiosidad. Después de pensarlo, me escribe: “Es un instinto natural ventajoso para la supervivencia, que te empuja a buscar información en el medio en que interactúas.”
José Saramago escribió: “La vejez empieza cuando se pierde la curiosidad”.
¿Y la creatividad? “Es generar conceptos o nuevas sensaciones entre las ideas y lo conocido, y que habitualmente producen soluciones nuevas y originales.”
Les dejo aquí reflexiones de Carlos:
- “Vivir en la creatividad hace que tu vida sea más interesante, trascendente y reconfortante”.
- “Es más fácil generar curiosidad en la gente (condición que nos lleva a la creatividad y, por consiguiente, a la felicidad), en lugar de implementar procesos innovadores dentro de una empresa, institución o asociación”.
- Partiendo de la premisa de que “la curiosidad es una comezón dentro del cerebro que sólo se quita rascándose con información”, vamos a construir un escenario de creación y diversión, para generar recursos por medio del trabajo colectivo.
- Carlos considera que “el ADN de una empresa es la suma de todos los ADN de sus empleados”. Por eso, es tan importante la colaboración.
- Empujar a la gente a ser más curiosa dentro de las organizaciones lleva, por consecuencia, a un desarrollo innovador del sistema. Los individuos que colaboran para crear, viven más contentos dentro de sus instituciones y producen más valor, tanto para la empresa como para ellos mismos.
- Es mejor tener a un grupo de personas libres y curiosas trabajando con mucha pasión y desarrollando en conjunto nuevas ideas, que crear departamentos liderados por jefes armados con látigos creativos. La innovación disruptiva de hoy viene de procesos tecnológicos en colaboración y diversión.
- En México, las empresas ven a la innovación “como a la bandera clavada hasta la punta más alta de una montaña”, un elemento muy difícil de alcanzar por los mortales y que normalmente es alcanzada únicamente por algunas empresas globales.
Con la pasión en la piel, Carlos agrega: Cuando hablamos de innovación, las empresas nacionales únicamente destinan 8,000 millones de dólares al año en este rubro. Es muy triste descubrir que esta cantidad sólo representa 0.48% del PIB (2010), mientras que economías con las que competimos todos los días, como la estadounidense, destina 2.83% o la coreana un impresionante 3.73%.
Esto se traduce en un franco aletargamiento de la innovación nacional, tenemos que cambiar el rumbo.
Si entramos al giro de 720 grados como individuos y como sociedad, nuestro país iniciara un giro exponencial que catapultará a miles de empresarios apasionados del éxito, opina Carlos.
Es el momento ideal para unirnos y lograr de una vez por todas, un cambio verdadero en innovación, asegura. Los empresarios quieren crear, proponer, cambiar al mundo, el problema es que no tienen la costumbre de generar conceptos novedosos, y esto es una actividad que se puede enseñar, aprender y practicar, explica.
“Tenemos la frontera más grande con el país más consumidor del mundo, tenemos los recursos, la oportunidad histórica, la estabilidad económica y la mano de obra calificada, únicamente tenemos que iniciar un cambio como sociedad y entrar al giro de 720 grados”, escribe Carlos en su libro.
Amigos, esperamos que después de leer este blog, les hayamos provocado puntos de reflexión y de acción para que la curiosidad genere en ustedes creatividad como parte importante en su vida, y alcancen la felicidad que da el orgullo de obtener los resultados de la innovación en sus vidas.
La próxima semana platicaremos con
Rosario Marín. Podrán conocer cómo se convierte en la mexicana con más alta responsabilidad en el gobierno de Estados Unidos, ocupando el puesto de tesorera de la nación.
Luis Valls
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