Cuba no es un lugar atractivo para el lavado de dinero y financiamiento al terrorismo, entre otras cosas porque las personas y estructuras jurídicas con actuación en la isla son mayormente estatales.   Muchos hemos seguido con atención y altas expectativas la nueva política exterior de Estados Unidos con respecto a Cuba. La hoja informativa sobre el tema es muy clara al expresar que el 1 de julio de 2015 el presidente Obama anunció la histórica decisión de restablecer relaciones diplomáticas entre ambos países a partir del 20 de julio. El Departamento de Estado de EU también notificó al Congreso su intención de convertir la Sección de Intereses de Estados Unidos en la Habana en Embajada de Estados Unidos en la Habana, a partir de la misma fecha. Éstos son importantes pasos para implementar la nueva dirección en las relaciones bilaterales anunciada por el presidente Obama el 17 de diciembre de 2014. Por otra parte, punto relevante a destacar son, sin duda, los esfuerzos que ha realizado Cuba para atacar las finanzas de delincuentes y terroristas. Dichos esfuerzos los podemos encontrar en el Informe de Evaluación Mutua de la República de Cuba que publica el Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat), una organización intergubernamental de base regional que agrupa a 16 países de América del Sur, Centroamérica y América de Norte para combatir el lavado de dinero y la financiación del terrorismo. El informe resume las medidas contra el lavado de dinero, la financiación del terrorismo y la financiación de proliferación de armas de destrucción masiva (ALD/CFT/CFPADM) instauradas en la República de Cuba a la fecha de la visita in situ (septiembre de 2014). Analiza tanto el nivel de cumplimiento del país con las 40 Recomendaciones del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), como el nivel de efectividad de su sistema ALD/CFT/CFPADM, y plantea recomendaciones respecto de cómo se podrían reforzar algunos aspectos de dicho sistema. Se menciona, entre otros aspectos relevantes, que a la fecha de la visita in situ pareciera que Cuba no es un lugar atractivo para el lavado de dinero y financiamiento al terrorismo (LD/FT). Las particularidades del contexto y materialidad en Cuba hacen que el riesgo general para el LD/FT sea reducido. Se resalta la coordinación y cooperación interinstitucional a todos los niveles del Estado cubano. La Evaluación Nacional de Riesgo de LD/FT (ENR) y el desarrollo de una Estrategia Nacional contra el lavado de dinero y el financiamiento al terrorismo (ALD/CFT) constituyen el primer ejercicio llevado a cabo por Cuba específico en materia ALD/CFT. Otro aspecto a tomar en cuenta para este tema es que el sistema financiero cubano está compuesto por pocos sujetos obligados y cuenta con baja internacionalización. Adicionalmente, desde hace años se han implementado medidas ALD/CFT. Se reconoce que la República de Cuba tiene un sistema de supervisión para las instituciones financieras bancarias y no bancarias que se basa principalmente en la idoneidad y en la efectiva aplicación del sistema de supervisión, desarrollado por la Superintendencia del Banco Central de Cuba, comprendiendo en su actuar la mayor parte de los riesgos de lavado de activos y financiamiento al terrorismo relevantes, de conformidad con el contexto de la economía cubana. El aparato institucional y normativo existente en Cuba para la identificación de terroristas, grupos de terroristas o redes de apoyo designados por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas o indicados por terceros países y la capacidad de promover las acciones para privar las entidades de los activos es completo y consistente. Las personas y estructuras jurídicas con actuación en Cuba son mayormente estatales. Esta característica hace que el riesgo de lavado de dinero y financiamiento al terrorismo sea reducido, ya que el abuso de las sociedades y/o estructuras jurídicas con fines ilícitos no resulta atractivo para las organizaciones criminales. Es muy importante que todos los países tengan lineamientos similares para combatir la finanzas de la delincuencia, y en este aspecto las recomendaciones del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) son un excelente referente para su cumplimiento. John Stuart Mill, filósofo, político y economista inglés, dijo: “No existe una mejor prueba del progreso de una civilización que la del progreso de la cooperación.” ¿Qué opinas, estimado lector?   Contacto: Contacto: Correo: [email protected] Twitter: @GarciaGibson Página web: García Gibson Consultores, SC   Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

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