Existen tres factores que debilitaron al tipo de cambio en el penúltimo mes del año, la tendencia indica que el peso seguirá perdiendo terreno.    La divisa mexicana cerró la última jornada de noviembre en alrededor de 13.92 pesos por dólar, con una depreciación de 3.14% o 43.8 centavos, la divisa se cotizó en un mínimo de 13.7626 pesos por dólar y un máximo de 13.9590 pesos por dólar, nivel no visto desde el 26 de junio del 2012. “El dólar continuará fortaleciéndose durante la primera mitad de diciembre a lo largo del mercado cambiario, situación que podría llevar con fuerza al tipo de cambio a niveles por arriba de 14.00 pesos por dólar en el corto plazo”, advierte Gabriela Siller, directora de análisis de Banco Base. La analista explica que hay tres factores que influyen en el tipo de cambio:
  1. La estacionalidad propia del mes en donde generalmente se da un incremento en la demanda de dólares y por lo tanto una depreciación del peso, debido a la cercanía del cierre del año.
  2. La expectativa de que la Reserva Federal incrementará su tasa de referencia en 2015, a la luz de que los indicadores económicos publicados durante noviembre en Estados Unidos resultaron ser más favorables de lo anticipado.
“En las minutas de la pasada reunión de política monetaria de la Reserva Federal, uno de los miembros del FOMC indicó que los comunicados deberían incluir otro lenguaje en donde se retire la expectativa de mantener bajas tasas de interés por un tiempo considerable. Es importante recordar que esto contrasta con las posturas de los principales bancos centrales del mundo los cuales mantienes posturas altamente acomodaticias, en particular el Banco Central Europeo, el Banco de Japón y el Banco Popular de China”, señala la analista. La expectativa de una subida en tasas de interés genera una menor entrada (o salida) de dólares de las economías emergentes, provocando depreciaciones. México fue la quinta economía con mayor inversión en cartera desde las inyecciones de la Reserva Federal, lo cual hace susceptible al peso ante la posibilidad de un incremento en tasas de interés. 3. La decisión de la OPEP de mantener sin cambios su cuota de producción en 30 millones de barriles diarios, ocasionó una fuerte caída en los precios internacionales de crudo, llevando al WTI a tocar un mínimo de 65.69 dólares por barril, nivel no visto desde mayo de 2010, mientras que el Brent tocó un mínimo de 69.78 dólares por barril al cierre del mes. En México el precio de la mezcla mexicana de petróleo se ubicó por debajo de 70 dólares por barril por primera ocasión en cuatro años.

 

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