Se abrió al público el 9/11 Memorial, un lugar de reflexión en que el único objetivo es rendir un homenaje a los hombres, mujeres y niños que ese día perdieron la vida.     Hay cosas que no se olvidan… y creo, sin temor a equivocarme, que lo que ocurrió la mañana del 11 de septiembre del 2001 nunca se irá de nuestra memoria. A la mayoría nos tocó ver esa mañana, en tiempo real, uno de los ataques terroristas más grandes de la historia, en el cual Nueva York, una de las ciudades con más impacto económico y cultural del planeta, se veía completamente vulnerable, y lo que conocíamos como el símbolo financiero más importante de la era moderna, se reducía a cenizas y escombros. Después de mucho pensar qué ocurriría con este lugar, a 11 años de distancia se abrió al público el 9/11 Memorial, un lugar de reflexión en que el único objetivo es rendir un homenaje a los hombres, mujeres y niños que ese día perdieron la vida. El área en que se encontraban las Torres Gemelas continúa en construcción, y ahí se planea erigir un complejo de oficinas y tiendas con un diseño espectacular que encaja a la perfección con la majestuosidad de la ciudad, pero a partir de septiembre del 2012 el espacio dedicado a las víctimas del atentado está abierto al público. dscf9096 La logística para conocerlo es muy sencilla, pero si no se lleva a cabo, esta visita puede traducirse en una larga espera. Primero es necesario ingresar a la página 9/11 Memorial, en la que es necesario reservar una cita para conocerlo; tiene la opción de seleccionar el día y la hora en la se quiere acceder. Inmediatamente, vía correo electrónico recibirás una clave de confirmación y una dirección ubicada a unas dos cuadras de distancia del Memorial para que recojas tu boleto. Te recomiendo llegar a reclamar tus entradas por lo menos una hora antes de cuando esté marcada tu cita, pues te encontrarás con una larga fila para canjear este código y una más para acceder al Memorial, y si decidiste ir sin hacer reservación, mentalízate para esperar por lo menos tres horas más. Es importante aclarar que este pase es gratuito y aunque existe la opción (tanto en la página como en urnas ubicadas dentro de este espacio) de hacer un donativo para la construcción de un museo dedicado a este hecho, no estás obligado a hacerlo. La revisión para entrar es similar a la de un aeropuerto: es necesario pasar por un detector de metales e inspecciones aleatorias, y aunque esto es molesto, la solemnidad del lugar lo amerita y es comprensible que se tomen precauciones. ¿Qué es lo que verás al entrar? Si esperas una gran edificación o algo espectacular, temo decirte que vas a desilusionarte, pues la oferta de este espacio es muy simple: lo que hay en su interior es una sensación de paz. El 9/11 Memorial está formado por dos piscinas gigantes en las que al asomarte verás y escucharás agua fluyendo, mientras que en los bordes están grabados los nombres de cada una de las víctimas al lado del agua, simbolizando ciclos, paz, vida, principios y finales. Si buscas un nombre específico, ahí están ubicadas varias computadoras que te ayudarán a ubicar el lugar exacto en que se encuentra y, en algunos meses será posible pasear por el museo del lugar, la sensación al estar ahí definitivamente sacude pues no es raro que te toque compartir la visita con algún pariente o amigo de una de las víctimas, por lo que la actitud en todo momento debe ser de reflexión y respeto. El 9/11 Memorial es un lugar distinto en Nueva York, un espacio de reflexión y un recordatorio de algo que nunca debió haber pasado pero que dejó una gran enseñanza, te recomiendo ampliamente dedicarle una tarde a esta visita, te aseguro que vale la pena. dscf9088     Contacto: Correo: [email protected] Twitter: @mariagiuseppina     Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

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