Clint Ramos tiene un Premio Tony por diseñar trajes de Broadway de varios miles de dólares y por haber vestido a celebridades como Sutton Foster y Lupita Nyong’o, aún cuando su propio vestuario es bastante limitado con simples grapas de diseño.
Por: Karen Hua
Traducción: Giselle Opalin
Sweet Charity, un remake de la película musical de 1969 dirigida y coreografiada por Bob Fosse, aborda temas feministas modernos a través de las crónicas de Charity Hope Valentine (interpretada por Foster), una anfitriona de la danza de los años 60 demasiado ingenua para reconocer cómo los hombres ricos la usan como su tapete.
Aunque está inspirado en los años 60, el guardarropa no recurre a los clichés del vintage del mod o del dayglow de la era. En muchos casos, Charity es una inadaptada entre la gente opulenta y sus alrededores. Ramos es un maestro de la sutileza de diseño de trajes que enmascaran la difícil situación de la protagonista. “(Charity) utiliza el humor para ocultar su dolor y sus dificultades”, dijo. “Así que quería que su disfraz estuviera un poco ‘apagado'”.
El vestido de lavanda de Charity y las botas blancas desgastadas – emparejadas con una peluca rubia destacada – son casi clownish. El acto de Foster de quitar la peluca en una de las primeras escenas resume cómo Charity usa la ropa como una armadura, una forma de controlar cómo el mundo la ve y la trata.
Lee también: Las mejores series de la realezaRamos, que ha trabajado con Foster en tres shows anteriores, explicó: “Vemos el lado glamoroso de Sutton en la televisión, pero ella estaba interesada en esta idea de la Charity como un payaso. Para que parezca real, tenemos que hacerla un poco extraña.
Diseñado en tonos brillantes, grabados intencionalmente pegajosos y accesorios de la declaración, la ropa yuxtapone las desgracias trágicas de Charity . El optimismo de Charity la atrapa a través de cada romántico desgarre, y los trajes vibrantes se cosen con un hilo a través de la eternidad ineludible de las mujeres en el salón de baile, fomentando una intimidad entre ellas.
“En los musicales, hay una tendencia a hacer todo glamoroso”, dijo Ramos. “Al reexaminar la definición tradicional de ‘bonito’-especialmente con un musical que trata con las partes más duras de la vida- quería hacer una declaración de que lo que es mejor que lo bonito, es lo real”.
Del mismo modo, en Eclipsed (establecido en la guerra devastadora de Liberia), los trajes también reflejan una vida de adversidad. “Lupita era sólo un de esas actrices que no temía mirar a su personaje a los ojos como ‘¿cómo se ve ella realmente? Quiero dejar a un lado la vanidad’ “, recordó Ramos.
Ramos, que ha vestido su cuota de A-listers para el escenario de Broadway (incluyendo Bradley Cooper para Elephant Man y Jake Gyllenhaal para el Próximo Domingo en el Parque), actualmente está trabajando en un nuevo rock musical basado en St. Joan of Ark Y un renacimiento de Broadway de seis grados de separación.
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