Vail, en el centro de Colorado, Estados Unidos, se ha convertido en la meca para los aficionados a los deportes de invierno. Un slalom gigante para amantes del lujo.
Un ambicioso plan de expansión y renovaciones en cinco años es lo que Vail Resorts pone en la mesa para crear las atracciones invernales más grandes, lujosas y novedosas en Estados Unidos. La montaña de Vail, el icono de estos resorts, celebró su 50 aniversario hace dos años con una renovación millonaria. No obstante, aquel fue apenas el comienzo de los planes de esta industria de nieve.
Vail Resorts estima una inversión de 500 millones de dólares para elevar aún más todos sus destinos de esquí entre 2015 y 2020. Tan sólo este invierno se tienen contemplados 100 MDD para ofrecer a sus visitantes una experiencia de lujo absoluto. El presupuesto incluye modificaciones en cada uno de sus destinos: en Vail se espera la actualización de sus teleféricos, en Utah el posicionamiento de Park City, el resort de esquí más grande de Estados
Unidos, en Beaver Creek se busca innovar en la creación de nieve en polvo y en Perisher, Australia, la más reciente adquisición de este conglomerado,
se pretende remodelar por completo el sistema de creación de nieve.
Una montaña de campeonato
A principios de 2015 se realizó el Campeonato Mundial de Esquí Alpino en Vail, siendo esta la cuarta ocasión en la que los juegos son llevados a cabo en Estados Unidos. El evento no sólo atrajo más de 700 atletas y miles de espectadores, sino que también se derivó en una fuerte inversión para realizar mejoras en el resort.
Vail supera ya medio siglo desde su apertura, pero con todos los esfuerzos de transformación a los que se ha sometido se siente como un destino totalmente nuevo, tanto en la calidad de la nieve en sus pistas, como en la comodidad y velocidad de transportación de la base de la montaña a la cúspide y en las opciones de entretenimiento que se han abierto.
Dentro de las novedades que vale la pena conocer se encuentra el nuevo restaurante en la montaña, The 10th, en honor a los fundadores del resort. Este se encuentra disponible ya sea a través de las pistas de esquí o como una parada de la Góndola 1. Con platos típicos alpinos, funciona tanto como sitio de après ski como para disfrutar de una cena romántica.
The Lodge, el hotel tradicional de Vail que abrió sus puertas al mismo tiempo que se inauguraron sus pistas, ha evolucionado de la mano del destino ofreciendo siempre una hotelería de alto nivel que compite con los hoteles más nuevos que se han instalado en esta ciudad de Colorado. El Four Seasons, The Arrabelle y el Ritz-Carlton incursionaron en el Resort hace menos de 10 años, a comparación de este hotel boutique que cuenta con 52 años y que este invierno concluye una remodelación integral de sus instalaciones.
La ciudad de las blancas laderas
Uno de los proyectos más ambiciosos de Vail Resorts es Park City Mountain Resorts. La más reciente ampliación del grupo se encuentra en el estado de Utah, en Estados Unidos, y fue adquirida por el grupo el año pasado por 182.5 millones de dólares. El destino contaba ya con una afluencia de 4.1 millones de visitantes al año, sin embargo Vail Resorts está apostando por aumentar esta cantidad y ponerlo a competir con sus destinos en Colorado, que reciben cerca de 12.5 millones de esquiadores.
Con una extensión de casi 3000 hectáreas, tras haberlo conectado a Canyons Resort con un teleférico, pretende ser el resort más grande para esquí y
snowboard de Estados Unidos. Para conservar la línea que distingue a la cadena se ha contemplado una inversión de 50 millones de dólares en una góndola de alta velocidad para ocho pasajeros, un teleférico, la creación de nuevas pistas y un nuevo restaurante con capacidad para 500 personas.
La fuerte cantidad inicial con la que se impulsa este gran parque tiene una visión igual de ambiciosa, ya que se espera que este nuevo destino sume al menos 35 millones de dólares a las ganancias anuales de Vail Resorts. Desde que se anunció la compra y los planes de expansión las acciones del
grupo se elevaron 11.7%.
