Los productos orgánicos están de moda y… son un buen negocio
Cada vez más personas optan por el consumo de productos orgánicos. ¿Cómo han logrado seducir estos alimentos al mercado mexicano?
Por Alejandro Medina
Cuando a la comida se le ve como mero satisfactor y no como un acto consciente, puede provocar daños irreversibles a la salud, así lo afirma Juan José Díaz Franco, presidente de la Sociedad Española Médico-Jurídica para la Medicina del Trabajo.
Esto le ocurrió a Tatiana Solano, quien en los 20 años de trabajo como postproductora de video se acostumbró a la comida chatarra, desarrollando hipotiroidismo e hipoglucemia.
En pos de mejorar su salud, Tatiana se acercó a los alimentos orgánicos, con resultados tan positivos que decidió abrir su propia tienda en 2011: Kaypacha.
¿Moda o nuevos hábitos?
“El mercado de productos orgánicos sí fue primero impulsado por una moda, pero ya se convirtió en una forma de vida para quienes han entendido que deben saber el origen de lo que comen”, explica Tatiana.
Los productos orgánicos tienen la capacidad de mejorar la salud al reducir hasta 89% el nivel de agentes pesticidas dañinos en la sangre, dice un estudio del Instituto Real de Tecnología de Melbourne. De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la inocuidad es uno de los aspectos más importantes a tomar en cuenta.
Ya no sólo es comida sin pesticidas y conservadores, también hay artículos de cuidado personal, como jabones o champús, y productos alternativos a los fármacos. “El mundo orgánico ha crecido también en cantidad de productos”, comenta Tatiana Solano.
Pendiente positiva
Para la producción de orgánicos se utilizan 512,246 hectáreas en México y se emplea a 245,000 personas, 17 veces más que hace 20 años. El consumo interno aún es pequeño, pero estos productos se exportan sobre todo a Estados Unidos, Japón y la Unión Europea.
Cerca de 30% de mercancía comercializada en Kaypacha tiene origen mexicano. El crecimiento entre 2013 y 2014 ha sido de 50% anual y refleja que poco a poco los mexicanos están cada vez más dispuestos a pagar más por un producto que asegure inocuidad.
La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) trabaja desde 2014 en un distintivo orgánico mexicano que amplíe las posibilidades de exportación. Según la dependencia, Estados Unidos podría ser el primer país en aceptarlo en 2016.
Para Solano, las oportunidades de hacer crecer su negocio están en la educación alimentaria y en ofrecer servicios de valor agregado, como asesoría al momento de la compra. A través de sus perfiles en Twitter y Facebook, Kaypacha ofrece información sobre los productos orgánicos y sus beneficios. Esta medida le ha permitido entrar a otros mercados como es el de Sudamérica.
Lejos de pensar en abrir más tiendas, Tatiana tiene los ojos puestos en internet, plataforma con alto potencial comercial.
Encontró en la enfermedad una oportunidad de negocio. Sus males ya no la aquejan y su empresa prospera.
Pero no todas las personas corren con la misma suerte. Alejarse de los opiáceos endógenos, asegura Díaz Franco, es la clave para padecer menos estrés y tener una vida mucho más saludable.