Más gastos ineludibles y menos inversión componen PEF 2016

El incremento en los gastos obligatorios en la propuesta de paquete económico obstaculizó una verdadera reingeniería del presupuesto, ya que pese a que se prevé un aumento 3% del PIB en los ingresos tributarios, éstos no suplirán por completo la caída del 30% de los ingresos petroleros, de acuerdo con un estudio del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).   Dentro del Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2016, los gastos ineludibles (servicios públicos, pensiones jubilaciones seguridad social, participaciones a estados y costo financiero de la deuda) del gobierno representarán el 18% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, mientras que el gasto en inversión se reducirá 0.7% del PIB, siendo el rubro más afectado. El incremento en los gastos obligatorios en la propuesta de paquete económico obstaculizó una verdadera reingeniería del presupuesto, ya que pese a que se prevé un aumento 3% del PIB en los ingresos tributarios, éstos no suplirán por completo la caída del 30% de los ingresos petroleros, de acuerdo con un estudio del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP). El organismo agregó que el pago del costo financiero de la deuda, el resto del gasto no programable y las pensiones representan una importante presión al gasto, que no permite un cambio estructural basado en las prioridades del presente gobierno, ni en las evaluaciones de cada rubro de gasto. “Si bien hay un esfuerzo por hacer más eficiente y eficaz el gasto público, los recortes afectaron principalmente a la inversión, que cae en 0.7% del PIB.”, agregó. En conferencia de prensa, el director general del CIEP, Héctor Villareal, agregó que el Paquete Económico presentado por el Ejecutivo fue “el que se pudo” hacer, pero advirtió que los próximos presupuestos seguirán presionados por el gasto ineludible. “Los incrementos en los ingresos tributarios no petroleros pudieron paliar sólo parcialmente la caída en ingresos petroleros. Casi un 15 % de los presupuesto son requerimientos financieros, lo que en los últimos años ha generado incrementos considerables en la deuda pública federal.