Ocho pasos para saber si puedes aumentar tus ahorros

Una de las mejores formas de ahorrar es la domiciliación. Pero también lo es de gastar. Cuando te quitan el dinero antes de que llegue a tus manos es difícil que lo cuides, solamente aprendes a vivir con menos. Si no lo ves, no existe, ¿cierto? Pero si te dedicas un mes a reducir los gastos domiciliados o a buscar cómo ganar más dinero sin un esfuerzo continuo, estoy seguro de que no nada más hallarás fugas, sino áreas de oportunidad. Si te animas a hacer algunos cálculos y trámites es posible que vivas con menos e incluso que ganes un poco más a partir del próximo mes. ¿Con cuál empiezas?

1) Revisa tu consumo de agua

Te pongo un caso. Un amigo y su esposa vivían en un departamento donde pagaban 200 pesos de agua. Se mudaron a uno más grande dentro del mismo edificio y el recibo les llegó de 1,000 pesos. A la hora de hablarlo con las autoridades, les plantearon tres razones posibles: que el sistema de aguas local les esté cobrando una tarifa promedio de acuerdo con los consumos anteriores, alguna fuga interna o un error en el medidor. Cualesquiera de los tres escenarios tienen una solución que cambiarían totalmente el gasto de ese hogar en este rubro (aún están por averiguarlo). La otra opción es que realmente consuman tal cantidad de agua y en ese caso también hay varias formas de disminuir el gasto. Si consideras que tu consumo de agua no es tan alto como dice tu recibo, revisa si algo está mal.

2) Haz tu declaración de impuestos, aunque seas empleado

Si eres asalariado, el Servicio de Administración Tributaria te da la opción de hacer tu declaración anual y, en caso de que aplique, te pueden devolver el saldo a favor del Impuesto Sobre la Renta. El trámite es complicado y quizá necesites invertir en un contador, pero vale la pena.

3) Contrata todas las tarjetas de fidelidad y puntos de tus tiendas

Muchos supermercados te dan tarjetas de puntos que no únicamente puedes cambiar por ollas, sino por descuentos en algunos artículos a la hora de hacer tus compras. Estas tarjetas no cuestan y representan ahorros de hasta 100 pesos o más, dependiendo de tu gasto y los puntos acumulados, cada que pases por la caja.

4) Cámbiate de Afore

¿La Afore en la que está tu ahorro para el retiro es la que te da más rendimientos o es la que te asignaron? Revisa si el dinero para tu jubilación está en las mejores manos. La Consar recomienda una Afore para cada edad, así que esa puede ser tu guía para cambiarte y generar más rendimientos.

5) Cámbiate de cuenta de nómina

Algunos bancos ya te devuelven efectivo por pagos domiciliados a tu cuenta de nómina. Igual, implica un trámite de uno o más días, pero te darán dinero por no hacer nada.

6) Transfiere las deudas de tus tarjetas

Varios bancos mexicanos ofrecen tasas de interés preferenciales (desde 7.5%), para que transfieras tus deudas de tarjetas de crédito de otras instituciones o tiendas departamentales. Eso te puede beneficiar de tres formas: reduces el plazo de pago, consolidas tus deudas y te olvidas de varias fechas de pago, le bajas el costo a tus créditos. Los dos requisitos principales son: que tengas buen historial crediticio y que el banco te apruebe la tarjeta de crédito, primero.

7) Revisa si tus seguros son los más baratos

La diferencia en el costo de un seguro de auto en una compañía o en otra puede ser de hasta $5,000 al año, con una cobertura prácticamente igual. La lata es que debes comparar diferentes cotizaciones y leer varias pólizas, pero si pasas por ese ‘bache’, hay un buen ahorro.

8) Domicilia ahorros y pagos

Como te dije al principio, la domiciliación puede ser tu mejor amiga o tu peor enemiga. Domicilia tus ahorros y tus pagos; piensa en el dinero solo un día al mes, pero nunca dejes de revisar tus estados de cuenta. No te miento: cualquiera de estos trámites implica un gran esfuerzo, pero trabajar tantas horas por tu ingreso también, así que no regales tu dinero.   Contacto: Correo: [email protected] Twitter: @ComparaGuru Facebook: ComparaGuru Página web: ComparaGuru.com Blog: ComparaGuru.com   Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.