La desaceleración y rezago en el crecimiento es una suma de factores que el gobierno debe reconocer y atacar, el mal desempeño económico no sólo es evidente, fue también previsible.
La desaceleración de la economía mexicana ha sido un tema de preocupación para analistas, inversionistas y medios de comunicación, todos muestran sorpresa por el mal desempeño económico de México durante este primer semestre y los recortes en las perspectivas de crecimiento para este año.
Sin embargo la desaceleración era previsible. Desde finales del año pasado y principios de este, se veía como la economía global iniciaba un proceso de desaceleración y con esto, indicadores dentro de la economía mexicana seguían la misma tendencia.
El reloj de ciclos económicos de México que publica INEGI tiene meses mostrando con claridad como sus principales indicadores apuntan hacia una desaceleración de la economía y no debería estar tomando por sorpresa ni al mercado ni a los hacedores de políticas públicas.
*Fuente: INEGI , Reloj de los ciclos económicos de México.
Estos resultados se deben en buena parte a causa del difícil clima de la economía mundial. La desaceleración de los grandes motores como lo son China, Estados Unidos y Europa, se ve reflejada también en las economías emergentes. Sin embargo existen factores internos que pueden estar afectando el crecimiento en el corto plazo. Por ejemplo el atraso en el gasto público por parte del gobierno federal.
Dejando de lado el desempeño a corto plazo de la economía mexicana, es muy evidente desde hace tiempo que existen problemas institucionales, estructurales y de productividad que imponen un fuerte límite a la capacidad de crecimiento del país.
El crecimiento económico es posiblemente el “misterio” más grande para la ciencia económica y por esto mismo es posiblemente un área de atención y debate entre economistas y hacedores de políticas públicas, pero a pesar de esto existen algunos puntos en donde todos estamos en lo general de acuerdo.
- La educación favorece el crecimiento incrementando el capital humano, los países que invierten más en educación superior logran mayor productividad y reducen los costos de oportunidad de la Investigación y Desarrollo.
- La innovación de productos y procesos está vinculada al crecimiento económico.
- Una mejor recaudación sumada a un mejor gasto público (no necesariamente mayor) favorece estabilidad macroeconómica y el crecimiento.
- Una mejor distribución de la riqueza favorece la estabilidad y la competencia.
- Un marco legal claro y estado de derecho que proteja los derechos de propiedad favorece el crecimiento.
- Países con mal manejo macroeconómico, malas condiciones legales, mercados crediticios que funcionan mal, sistemas educativos deficientes, no innovan lo suficiente, tienen menor productividad, estabilidad y menor capacidad de crecimiento.
Entre los problemas más obvios de la economía mexicana están los aspectos financieros, impositivos, falta de innovación y un sistema legal que no favorece el respeto a derechos de propiedad. Todos estos factores y sus ramificaciones impactan negativamente en las perspectivas de crecimiento.
Tenemos una mala recaudación de impuestos: no existe un pago progresivo, el esquema está plagado de exenciones y condonaciones de impuestos a grandes grupos empresariales. El resultado es una disminución de la capacidad del estado de proveer bienes y servicios públicos de calidad. Otorga demasiado peso a la contribución de las clases medias y bajas que suelen ser las que más consumen afectando así el mercado interno y favoreciendo la desigualdad. La menor recaudación impone un menor gasto en infraestructura lo que implica un impacto por el lado de la productividad.
El sector financiero causa otro lastre para el crecimiento, al no colocar el crédito de forma eficiente entre los que desean ahorrar y los que tienen la necesidad de invertir. La falta de financiamiento se vuelve una barrera de entrada y favorece la concentración de los mercados (sólo empresas lo suficientemente grandes para obtener financiamiento sobreviven) disminuyendo la competencia y volviéndose un factor en contra de la innovación ya que el proceso de innovación entre pequeñas empresas es muy dependiente del acceso al crédito.
El progreso técnico que produce crecimiento económico a largo plazo proviene de la capacidad de generar innovaciones; nuevos productos, procesos y mercados que resultan de actividades de investigación y desarrollo deliberadas impulsadas por la competencia en el mercado. La mala recaudación y el mal funcionamiento del crédito afectan por distintos canales este proceso.
El mal uso del gasto público sumado con mecanismos de control deficientes y un débil estado derecho se vuelve un incentivo a la corrupción y a un menor respeto a los derechos de propiedad, un elemento fundamental para la inversión.
Por último la elevada desigualdad en México es un factor importante que puede explicar un poco la falta de crecimiento, evidencia histórica en diversos países, sugiere que en los periodos de mayor concentración de la riqueza la capacidad innovadora de los países disminuye, al generar barreras de entrada artificiales a los mercados transformando industrias con potencial competitivo en mercados oligopólicos donde la fuente del poder de mercado no es la innovación sino un poder desproporcionado para bloquear nuevos entrantes.
Teniendo esto en cuenta no resulta de ninguna forma sorprendente el desempeño mediocre de la economía mexicana, durante mucho tiempo ha permitido que diversos factores negativos al crecimiento se presenten. Reformas estructurales como lo fue la laboral no pueden resolver los problemas de crecimiento, hace falta mucho más, de inicio reconocer cuales son los mayores problemas, las reformas estructurales no pueden solucionar los problemas si el estado no tiene la autonomía suficiente para hacerles frente.
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