¿Qué se requiere para tener a más mujeres en cargos de poder?

Las mujeres en la política son una minoría que se enfrenta a obstáculos institucionales, culturales, económicos y sociales que limitan su participación, incluso, dentro de las esferas de poder.   En los últimos años ha habido avances significativos con relación a la participación política de las mujeres en México. Sin embargo, todavía queda un largo camino por recorrer para alcanzar la equidad de género y elevar el nivel de influencia de las mujeres en el ámbito político. Como avances cabe destacar el 3% del presupuesto ordinario de los partidos políticos destinado a la capacitación en liderazgo político de las mujeres; la aprobación de cuotas en las listas electorales a cargos de elección popular, y la reciente reforma en materia de paridad de género para los poderes legislativos, federal y locales. En el proceso electoral de junio de 2015 se registró el mayor número de candidatas a cargos públicos. Sin embargo, las mujeres que fueron elegidas para ocupar un cargo público sumaron minoría. Aunque se cumplió el mandato de paridad de género en candidaturas (ya que, por ley, los partidos estuvieron obligados a que la mitad de sus aspirantes fueran mujeres), de los 300 distritos, ganaron 116 candidatas a una diputación, representando 38%. En los estados donde hubo comicios para elegir gobernador, hubo nueve candidatas y solamente una, Claudia Pavlovich, en Sonora, fue elegida como gobernadora. En el Distrito Federal, 26 mujeres se postularon como candidatas a jefas delegacionales, de las cuales sólo cuatro obtuvieron la victoria. De acuerdo con los resultados de la pasada elección, las acciones afirmativas han incrementado el número de candidatas a cargos de elección popular. Sin embargo, un estricto cumplimiento de la norma de paridad en las candidaturas no es suficiente. Con la reforma política se propaga en el discurso que las mujeres son un elemento fundamental de la vida partidaria, pero no asegura su inclusión en los procesos internos de decisión y deja fuera los cargos públicos municipales y del Poder Ejecutivo. Los avances logrados hasta ahora ponen sobre la mesa nuevos retos. Las mujeres en la política son una minoría que se enfrenta con obstáculos institucionales, culturales, económicos y sociales que limitan su participación, incluso, dentro de las esferas de poder. Sólo por mencionar una situación, en el Congreso la mayoría de los coordinadores son hombres. Se requieren medidas para que las mujeres también participen activamente en las negociaciones y en los acuerdos, así como evitar prácticas discriminatorias comunes en la política mexicana, como las “juanitas” y colocar candidatas en los “distritos perdedores” sólo para cumplir con la cuota. Asimismo, el electorado no ha eliminado por completo los absurdos prejuicios que consideran que las mujeres no tienen las capacidades necesarias para ejercer de manera satisfactoria un cargo público. La participación de las mujeres en la política es necesaria para la consolidación de la democracia y para alcanzar una sociedad justa e inclusiva, en donde las demandas de todos los sectores de la población se traduzcan en cambios legislativos y en políticas públicas. Las mujeres están interesadas y preparadas para ocupar cargos públicos. Las acciones afirmativas no son suficientes para lograr un cambio de paradigma que nos beneficie a todos. Estando conscientes que el camino hacia la equidad de género es un proceso, hay que seguir trabajando por la participación política de las mujeres en igualdad de condiciones que los hombres. También está en nuestras manos promover la equidad de género en el ámbito político. Se requiere la sensibilización de la sociedad sobre la importancia de tener a más mujeres en cargos de poder. Los invito a que, como miembros del electorado y ciudadanos libres, en las próximas elecciones votemos por mujeres e impulsemos su liderazgo político.   Contacto: Twitter: @angelicafuentes   Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.