La declaración del mandatario estadounidense se da en una creciente tensión diplomática luego de que el jueves, el presidente Enrique Peña Nieto canceló su visita a Washington tras las presiones de Trump para que México pague el costo del muro fronterizo que pretende construir entre ambos países. Previamente, una “guerra” de declaraciones se desató en la red social, cuando el mandatario estadounidense amenazó con cancelar el encuentro “si México no está dispuesto a pagar por el muro”. Te interesa leer: El País llama a Europa a levantar la voz en defensa de México El mandatario estadounidense argumentó que México es el mayor beneficiado con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), ya que Estados Unidos tiene un déficit comercial de 60,000 millones de dólares. Peña Nieto reaccionó horas después, anunciando por Twitter que cancelaba la reunión prevista para el próximo martes, aunque reiteró su voluntad de trabajar con EU para conseguir acuerdos en favor de ambas naciones.Mexico has taken advantage of the U.S. for long enough. Massive trade deficits & little help on the very weak border must change, NOW!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) January 27, 2017
Tras la cancelación del mandatario mexicano, el vocero de la Casa Blanca, Sean Spicer, dijo a la prensa que se buscará “programar algo en el futuro” y que “mantendremos las líneas de comunicación abiertas”.
En tanto, durante un discurso ante legisladores y congresistas republicanos, Trump afirmó que había acordado con Peña Nieto cancelar dicha reunión por ser “estéril” mientras México no trate al país con respeto.
“Mientras México no trate con justicia y respeto a Estados Unidos, esté encuentro no tenía sentido”, subrayó. Lee la historia completa: No habrá reunión mientras México no trate con respeto a EU: Trump Durante su primera semana en la Casa Blanca, Trump ordenó la construcción inmediata de un muro a lo largo de la frontera con México y analiza imponer un arancel de 20% a las importaciones de ese país para financiar su construcción, que según legisladores republicanos podría tener un costo de 15,000 millones de dólares (mdd).