Las compras del yen se aceleraron tras una débil subasta de deuda del Tesoro estadounidense a tres años, lo que brevemente impulsó los rendimientos.   Reuters   El yen subió con fuerza frente al euro y el dólar  después de que el Banco de Japón se abstuvo de lanzar medidas adicionales para frenar la reciente volatilidad del mercado de bonos, generando dudas sobre su compromiso con una laxa política monetaria para impulsar el crecimiento. La falta de acción del BOJ para intentar reducir la amplia fluctuación en los precios del mercado local de bonos tuvo un efecto de cascada al arrastrar fuertemente a la baja las acciones en Tokio y sentando un tono negativo en los mercados globales. El índice bursátil de Japón, el Nikkei, con el que la paridad dólar/yen ha estado estrechamente correlacionada en las últimas semanas, cerró con una baja de un 1.5%. En los mercados de monedas, el alza del 3% del yen frente al dólar, y de casi el mismo porcentaje contra el euro, fue alentada por el retiro de algunas importantes apuestas en la moneda japonesa que se realizaron luego de que el BOJ anunció un programa de estímulo de 1.4 billones de dólares en abril. La moneda japonesa se fortaleció a 95.60 unidades por dólar, un avance de más del 3% que marcó su mayor fluctuación porcentual diaria desde el 16 de marzo del 2011. Más tarde, el dólar cotizó en 96.04 yenes, una baja del 2.73%. El euro cayó a mínimos de 127.07 yenes antes de recuperarse a 130.91 yenes, una pérdida del 2.32% en la sesión. El yen fluctuó mayormente durante la jornada de negocios en Asia y Europa, luego de que el BOJ se abstuvo de prolongar la duración máxima de sus préstamos a tasa fija. Algunos esperaban que extendiera la duración a dos años desde uno. El Tribunal Constitucional de Alemania, por su parte, inició una audiencia de dos días sobre la legalidad del programa de compra de bonos del Banco Central Europeo, con el que se ha apaciguado la crisis de deuda de la zona euro. El euro tocó un máximo de 1,3317 dólares y operó en torno a ese nivel con un avance del 0.45%. El alza vino después de que el consejero del Banco Central Europeo Joerg Asmussen dijo al tribunal que el plan de compra de bonos de la entidad debe ser ilimitado, para mostrar que el BCE se toma en serio la defensa de la estabilidad de precios.

 

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