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Estas son las 30 promesas de los negocios 2024

• Empresa: Chasseurs de Saveurs
• Equipo: Nicolas Didiere Terrien, Romain Javaux
• Fecha de fundación: 2017
• Facturación 2020: 13.5 mdp
• Expectativa de facturación 2021: 18 mdp
• Empleados: 18 ( benefician a 536 familias)

Nicolás Didiere relata que la idea de crear Chasseurs de Saveurs (Cazadores de sabores, en español) surgió cuando llegó a México y se dio cuenta de la mega biodiversidad del país. Se trata de una compañía que trabaja directamente con cooperativas que producen especias como café, vainilla, gengibre, cardamomo o canela en comunidades rurales.

“Somos dos jóvenes franceses especializados en el agro-desarrollo en zonas tropicales, con experiencia en países de Asia, África y América Latina. Después de casi 5 años viviendo y trabajando en el campo mexicano con productores de café, cacao y aguacate pudimos darnos cuenta de que el sector rural en México está en crisis. Hay altos niveles de marginación y pobreza, productores poco profesionalizados, hay una necesidad de repensar el modelo productivo y organizativo, además de que existe una amenaza constante por factores como el cambio climático”, relata Nicolás.

Esta realidad se encara a una demanda donde los clientes y consumidores buscan productos de calidad y socialmente responsable, pero con una constancia, seriedad y compromiso para mantener un mercado.

Para poder satisfacer la demanda de clientes como chefs de renombre o restaurantes de lujo, los emprendedores han trabajado de cerca con las comunidades para que los productores cumplan con estándares, como los de certificación de producción orgánica.

“Buscamos trabajar con personas para impactar la arquitectura del sector del campo. El sector rural tiene coyotes, intermediarios, es un modelo que genera pobreza. El reto es generar un modelo virtuoso, entender las diferentes realidades de los productores. En México, 60% de los productores tienen más de 60 años”.

La empresa tiene una metodología de acción, participación y organización con alrededor de 500 productores en una red de 9 cooperativas con acompañamiento técnico especializado, también puso en marcha un Programa de Certificación Orgánica de vainilla con 127 productores como impulso a la diferenciación comercial, la única red de producción orgánica.

En el mediano plazo, los planes incluyen una marca para retail ‘Cazadores de Sabores’, con la que planean vender en tiendas gourmet, también tener un sello de café tostado y molido para venta en cafeterías e incrementar la red de producción de vainilla.

Los productos de Chasseurs de Saveurs cuentan con certificación FDA para vender en Estados Unidos.

“El mayor reto está asociado con la cadena humana, los procesos, tener sistemas de control para la producción orgánica. El entorno de pandemia ha sido desastroso para las zonas urbanas, pero en el entorno rural hay oportunidades aún”.

 

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