La participación de las mujeres en puestos directivos significa una mayor ventaja para las empresas. De acuerdo con el estudio Índice de Género 3000: Las mujeres en altos puestos directivos, de Credit Suisse, las empresas con mayor participación femenina a nivel directivo presentaron mayores retornos, valoraciones e índices de desembolso. Otro estudio realizado por Catalyst y McKinsey en Estados Unidos y Europa demuestra una clara correlación entre el número de mujeres en el liderazgo corporativo y la rentabilidad de sus compañías. “En México, sólo 25% de los puestos directivos son ocupados por mujeres, cifra que desciende a 7% en consejos de administración”, señala el estudio de Catalyst y McKinsey. Un informe reciente de McKinsey Global Institute (MGI) también explica cómo el avance de la equidad de género puede agregar hasta 12 billones de dólares al crecimiento mundial. Estas son cinco cualidades de las mujeres que fortalecen a las empresas, según la firma consultora de reclutamiento especializado PageGroup. 1. Capacidad de organización.- En general, las mujeres presentan una mayor orientación hacia la planificación y coordinación. En puestos de alta dirección esto puede ser un valor agregado al momento de ejecutar procesos determinantes en la operación de las compañías o proyectar estrategias. 2. Multitasking. Uno de los factores que hoy definen los puestos de alta dirección, es la capacidad de estar al tanto de todo lo que sucede en las organizaciones, desde los aspectos internos hasta la agenda de los medios de comunicación. Esta cualidad sobresale entre las mujeres.  3. Empatía. Un rasgo que prevalece en las mujeres es su habilidad para identificar, analizar y comprender las distintas situaciones de las personas y presentar soluciones para éstas. Esta característica resulta ideal al momento de liderar equipos y desarrollar una relación fructífera, productiva y armoniosa con los colaboradores. 4. Atención al detalle. Comúnmente las mujeres suelen tomar en cuenta detalles sencillos que fácilmente podrían pasarse por alto. En el ámbito laboral esto les ayuda a tomar decisiones que integren variables adicionales a las normalmente consideradas. 5. Les es sencillo pedir ayuda. Las mujeres suelen identificar de manera más efectiva las situaciones en que precisan de apoyo de otras personas y lo solicitan. Con ello logran resolver conflictos o desarrollar proyectos de manera eficiente al tiempo que aprenden.

 

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