Todo el país está hablando de la crisis sobre el combustible: las largas filas en las gasolineras, los huachicoleros, la compras de pánico, el temor de un desabasto generalizado y la estrategia del gobierno. Para despejar tus dudas, hemos sintetizado en cinco ejes lo que debes saber para entender los profundos cambios que están ocurriendo en el sector de combustibles.   1. Las pérdidas económicas Aunque el robo de combustible comenzó a observarse desde el sexenio de los panistas Vicente Fox, con pérdidas reportadas por 12,000 millones de pesos,  el hurto de energéticos fósiles, también conocido como ‘huachicoleo’, se disparó en el sexenio de Enrique Peña Nieto. Tan solo en los últimos tres años, el robo costó 147,000 millones de pesos (mdp) a Petróleos Mexicanos (Pemex). Este número presentado por la administración de Octavio Romero Oropeza representó casi el doble de los 35,000 mdp estimados por el exdirector general de Pemex, Carlos Treviño, el pasado 27 de noviembre de 2018.   2.- La estrategia del gobierno Para abatir este problema, el 27 de diciembre de 2018, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, presentó su plan de atención a instalaciones estratégicas de Pemex, que incluyó a 15 dependencias gubernamentales, para reducir este flagelo. Este plan incluye el resguardo por parte de 4,000 efectivos en las seis refinerías y 77 terminales de almacenamiento y reparto de Pemex, el cierre de ductos cuando se detecten baja de presión en los ductos de la empresa y la tipificación de facturas falsas y la ordeña ilegal como delito grave. El político tabasqueño comentó que se trata de un plan estratégico necesario y urgente por la fuga de dinero público que representa para la empresa petrolera y el país. “No estamos sólo hablando del llamado huachicol, la ordeña de ductos; estamos hablando de un plan que tiene vinculación al interior del gobierno y que se apoya en un sistema de distribución de combustibles, porque no es fácil distribuir, vender 600 pipas diarias de gasolina”, declaró el mandatario mexicanos durante la presentación del plan.   3. El  cierre de ductos Tras observar baja de presión en el poliducto de Salamanca-León, que abastece a la zona de El Bajío, las autoridades ordenaron el cierre de esta infraestructura durante los últimos días de diciembre y hasta los primeros días de enero. Esta indicación desecandenó el desabasto en Jalisco, Hidalgo, Tamaulipas Guanajuato, Querétaro y Estado de México. Dichas entidades concentran poco más de 60% de las 1,341 ordeñas ilegales de octubre que sufrió la empresa productiva del Estado. El presidente de la Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros, Pablo González, dijo que, desde hace 10 días, siete de cada 10 estaciones de servicio en Jalisco carecen de combustible, lo que ha significado 2,100 millones de pesos en pérdidas. El gobierno prometió el envío de 94,000 barriles de combustible para atender la demanda. Aquí la historia completa: Gasolineros de Jalisco pierden 2,100 millones de pesos por desabasto de combustible   4.  Desabasto y compras de pánico Tras los reportes en dichos estados de la República Mexicana, múltiples usuarios en redes sociales comenzaron a difundir largas filas de automóviles en  gasolineras en la Ciudad de México y su posterior cierre. El lunes 7 de enero, López Obrador aseguró que no existe desabasto, pues México cuenta con la gasolina suficiente para atender la demanda nacional, pero al cerrar los ductos, hay un problema de logística para llevar la gasolina a las localidades con escasez de producto. El martes 8 de enero, Rocío Nahle, secretaria de Energía, reconoció que hubo una falla logística tras el cierre de ductos, se disculpó con la población y prometió que se normalizará el abasto en corto plazo, sin detallar cuándo. Ese mismo día, la marca española Repsol incluso admitió el cierre de su primera estación de servicio en el país debido a la falta de suministro de Pemex. La red de gasolineras G500 admitió la suspensión intermitente de estaciones por la sobredemanda. Aquí la historia completa: Repsol cierra su primera gasolinera en México por desabasto De las 439 gasolineras existentes en la Ciudad de México, solo 17 han suspenido el servicio por falta de gasolina, un pérdida aglutinada de 2.3 millones de pesos diarios o 140,000 pesos por estación, reveló la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de la Ciudad de México (Canaco). La mañana del 9 de enero, el presidente dijo que se registró una fuga en el ducto Tuxpan-Atzcapotzalco lo que agravó el desabsato en el centro del país.   5. Transporte alterno El gobierno de López Obrador sustituyó el transporte de gasolina por poliductos a pipas de Pemex. La empresa mexicana cuenta con más de 1,400 unidades para el reparto, pero el problema es que esta cantidad solo alcanza para mover entre 10 y 15% de la demanda nacional por esta vía. Además, el costo de transportar combustible por ruedas es 14 veces más caro que hacerlo por ductos, de acuerdo con la Comisión Reguladora de Energía (CRE). Nahle reveló que Pemex tiene 1,600 pipas disponibles y ha rentado 3,400 unidades más para distribuir el combustible en las zonas afectadas. El presidente de Amegas dijo a Forbes México que la situación de desabasto no se normalizará por lo menos hasta el 31 de enero.

 

Siguientes artículos

Hay una “tregua” de los mercados financieros al gobierno de AMLO
Por

La presentación de las acciones para fortalecer el sistema financiero del país, el 8 de enero pasado, ha generado un amb...