La Jornada Nacional de Sana Distancia establecida por autoridades sanitarias a nivel federal concluyó el pasado sábado 30 de mayo, mismo día en el que se reportaron 84,627 casos confirmados de personas contagiadas por Covid-19 y 9,415 defunciones. 

Funcionarios encargados de dirigir la política de salud en el país han señalado de manera enfática que la conclusión de esta “Jornada Nacional” no implica que se retorne a las actividades normales o la apertura de negocios y empresas al por mayor, sino que se evoluciona a una estrategia localizada en las medidas de confinamiento. 

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“Consideramos que era muy importante tener una intervención nacional generalizada, y justamente la interrupción en el Sistema Nacional Educativo que puso a consideración el maestro Moctezuma Barragán fue una gran, gran oportunidad, con una sola decisión administrativa de carácter central se suspende la circulación en el espacio público de casi 40 millones de personas. Entonces, eso fue el pivote de la Jornada Nacional de Sana Distancia, después se agregaron los otros dos ámbitos, el laboral y el social, y nos permitió tener un impacto nacional”, apuntó Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud. 

De jornada nacional a sistema de semáforo 

Esta mañana el gobierno federal iniciará la puesta en marcha de un sistema de semáforo por regiones para la reapertura de actividades sociales, educativas y económicas. 

El semáforo consta de cuatro colores en el que se determinarán las actividades que podrá reactivarse y el cual tomará en cuenta el número de contagios confirmados en cada región y la ocupación de sus hospitales. 

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Rojo: En esta etapa únicamente se permitirá la reactivación de la minaría, construcción y fabricación de transporte, además de las denominadas actividades esenciales, que contempla los hospitales y servicios de salud, el transporte de carga, industria química, servicios de seguridad pública, servicios bancarios, casas de adultos mayores, aeropuertos, ferreterías, gasolineras, industria de alimentos, servicios de mensajería, agricultura, pesca y ganadería; mercados y supermercados, guarderías, transportes de pasajeros, telecomunicaciones y servicios funerarios. 

Naranja: En esta etapa se permitirá el funcionamiento de actividades esenciales y no esenciales con espacio laboral y público reducidas con medidas de máximo cuidado a la plantilla laboral. 

Amarillo: Una vez que se establezca a una región en esta etapa podrán operar todas las actividades esenciales y no esenciales sin restricción, pero se establecerán medidas de vigilancia para espacios públicos y se establecían medidas de cuidado medio. 

Verde: Será hasta esta etapa en la que se reanuden las actividades escolares y pese a que se permitirán todas las actividades laborales esenciales y no esenciales se continuará la vigilancia de medidas de seguridad sanitaria en todos los espacios. 

Desinfección, higiene y sana distancia 

Sean consideradas actividades esenciales o no esenciales, los centros de trabajo tendrán que llevar a cabo toda una serie de medidas enfocadas en evitar que surja un brote de contagios por Covid-19 en esos espacios. 

Los estándares establecidos por la Secretaría de Economía descansan en tres pilares: desinfección, higiene y sana distancia. Los centros laborales llevarán a cabo una autoevaluación que emitirán al Instituto del Seguro Social Mexicano (IMSS) y a través de una carta se comprometerán a cumplir con todos los estándares de seguridad, y la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STyPS) se dedicará a inspeccionarlos  y en caso de que estos no los cumplan podrán multarlos o clausurarlos. 

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Para mantener las medidas de sana distancia se deberán de respetar dos pilares fundamentales: que los trabajadores que tengan síntomas de enfermedad respiratoria permanezca en casa y el segundo, modificar hábitos para permitir que haya una distancia mínima de 1.5 metros entre los trabajadores. 

Para los controles de ingreso y egreso de los empleados, se ordena establecer un filtro para identificar a personas con signos de enfermedades respiratorias o temperatura corporal mayor a 37.5 grados centígrados, en caso de detentar empleados con estos síntomas se deberá contar con  un área de estancia y aislamiento, dotarlas de un cubrebocas y remitirlas al domicilio particular o servicios médicos.

Para prevenir contagios en las empresas, la Secretaría de Economía solicita contar con equipamiento como dispensadores con soluciones a base de alcohol en gel, productos sanitarios y de equipo de protección personal a los trabajadores como cubrebocas, lentes protectores y caretas y depósitos de productos desechables. 

Los centros de trabajo también deberán señalizar en áreas comunes con marcas en el piso, paredes y mobiliario recordando la distancia mínima de 1.5 metros entre personas; además de establecer una “política para el uso de las escaleras” para mantener la distancia entre empleados y evitar que toquen superficies como barandales de tránsito. 

Hasta el domingo 31 de mayo las autoridades sanitarias informaron que únicamente el estado de Colima se encontraba en la etapa “amarilla” del semáforo con 151 casos positivos. 

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