Leonardo Daniel Contreras y Ariadna Rubi González son emprendedores de origen mexicano que mantienen el sueño de ayudar a mujeres en América Latina a generar ingresos adicionales y autoemplearse.
En México existen aproximadamente 190,000 establecimientos dedicados a la actividad de salones y clínicas de belleza. Estos emplean a más de 480,000 personas, en su mayoría mujeres, de acuerdo con un análisis de Market Data México.
Aunque se trata de una cifra alta, ésta refleja únicamente establecimientos formales que hoy en día son la minoría, ya que muchas aplicadoras no cuentan con un espacio propio y ofrecen servicio a domicilio o atender en espacios dentro de su propia casa.
“Durante mucho tiempo fui madre soltera, ama de casa y mujer desempleada. Encontré en la aplicación de uñas una forma de generar ingresos extra sin descuidar a mis hijos. Me di cuenta que así como yo, millones de mujeres vivían la misma situación”, expresa Ariadna Rubi González.
Fue así como Ariadna decidió compartir sus conocimientos sobre la manera correcta de aplicar uñas acrílicas por medio de sus redes sociales. Generó empatía logrando llamar la atención de Leonardo, actual co-fundador y CEO de Gonvar.
Leonardo, quien en ese momento era estudiante de Ingeniería Mecatrónica en el Tecnológico de Monterrey, vio la oportunidad de crear una plataforma de contenido educativo en temas de belleza donde las mujeres pudieran aprender desde un dispositivo móvil.
“Nuestra misión es clara, queremos digitalizar el mundo de las uñas y de la belleza, ofreciendo una gran experiencia digital y el mejor contenido para acelerar el aprendizaje y el emprendimiento de la mujer en las diferentes áreas de la belleza en México y Latinoamérica”, menciona Leonardo.
Comunidad en crecimiento
Gonvar ayuda principalmente a que un sector vulnerable de la población, madres solteras y mujeres con pocos ingresos, puedan desarrollar habilidades que las ayuden a generar un ingreso adicional para su hogar.
La aplicación y decoración de uñas, así como el estilismo y el maquillaje son temas de principal interés para las mujeres en Latinoamérica, esto facilita su motivación por aprender y emprender en el sector. Un ejemplo de esto es Isabel Tello, quien antes de estudiar en Gonvar, no tenía empleo.
“Me encontraba en una situación económica difícil, así que decidí suscribirme a su plataforma. A pesar de no tener internet en casa, decidí asistir a un café internet y ahí terminé mis cursos. Ahora cuento con un salón de uñas propio, estoy certificada y he podido llevar un plato de comida a casa”, relata.
Comenzaron en 2020 y hasta ahora cuentan con 30,000 alumnas y más de 2 millones de seguidores en sus redes sociales, donde generan una alta interacción llegando a realizar lanzamientos en Facebook mediante En vivos con más de 26,000 personas conectadas.
Gonvar crece entre un 30% y un 35% mensual en usuarios y visitas y aunque el proyecto se encuentra en una etapa inicial, la empresa se prepara para aplicar al programa acelerador de startups Y Combinator para mejorar su propuesta de valor y así lograr atraer a inversionistas.
Su visión a mediano plazo es transformarse en una empresa tecnológica líder a nivel mundial, capaz de proporcionar herramientas que permitan brindar mejores servicios de belleza para todos, en todas partes.
Así funciona Gonvar
Gonvar desarrolla tecnología y contenido educativo mediante una suscripción mensual, en la cual las estudiantes adquieren acceso a decenas de cursos de belleza, realizan prácticas y son evaluadas hasta conseguir diplomas y reconocimientos.
La startup también fabrica y distribuye mediante su eCommerce productos cosméticos de la marca.
“Nuestro siguiente paso es convertirnos en el Uber de los servicios de belleza: conectando profesionales con usuarios.” agregó Leonardo.
