Durante la última década, las inversiones en bienes raíces han estado disponibles para un porcentaje de la población que no cuenta con suficientes recursos para adquirir un inmueble, pero que quiere invertir en tierra y ladrillos para tener certeza a través de un bien tangible. En este tiempo, las inversiones en bienes raíces han sido posibles con montos de inversión muy bajos porque la tecnología ha avanzado a grandes pasos, lo que permite que se gestionen de manera digital, más rápidas y accesibles, ya que se puede invertir en diferentes ciudades y países sin la necesidad de estar presente en la ubicación. Además, los trámites de adquisición se pueden realizar desde la comodidad de cualquier dispositivo digital, con la misma certeza legal y jurídica. 

Sin embargo, la creación y especialización de los diferentes modelos de inversión en bienes raíces obligan a usuarios, consumidores e inversionistas a buscar la mejor alternativa, según necesidades específicas. 

Existe la creencia que en el mundo de bienes raíces siempre se va a ganar, pero existen muchos proyectos que fracasan y lo podemos ver con edificios a media construcción y abandonados. O bien, es posible que cuando invertimos en bienes raíces, no exista una estrategia integral óptima respaldada por una institución u organismo para las necesidades del inversionista. Aunado a estas situaciones, debido a la falta de educación financiera en México y esquemas fraudulentos, la población no invierte desconociendo esquemas de inversión seguros y rentables. 

FINDIS

De acuerdo con Ernesto Bermúdez, director general de Altra Capital, existen criterios para que un proyecto inmobiliario tenga éxito y pueda cumplir con las expectativas de los inversionistas: 

  1. Escucha las necesidades de tus clientes para generar un proyecto específico de nicho capaz de construir una comunidad integrada en la ciudad.
  2. 2. Apegarse a las normativas de construcción para cumplir todos los lineamientos establecidos por las autoridades.
  3. Estructurar de forma inteligente y eficiente los flujos del proyecto, para que el esquema más conservador de ventas tenga solvencia necesaria.

Cuando un inversionista quiere invertir en bienes raíces, es preciso conocer a detalle cuál es la mejor alternativa ante una amplia gama de opciones.

En palabras de Francisco Richardt, director general de FINDIS: “las inversiones en bienes raíces son las más nobles, ya que te permiten generar rendimientos muy atractivos y con una gran solidez, pero muchas veces carecen de una estrategia. La estrategia óptima es dividirla en dos: cuando contamos con poco capital el objetivo es impulsarlo con proyectos a corto plazo, máximo uno o dos años, y seguir ahorrando para después invertir en bienes raíces que nos den flujo; y una vez que crecimos un capital relativamente importante, entonces el objetivo es invertir en bienes raíces que nos entreguen un flujo de efectivo de manera mensual, bimestral o trimestral.

Ahora bien, ese ingreso pasivo (flujo de efectivo) podríamos utilizarlo para dos esquemas: reinvertir y seguir multiplicando nuestro dinero, o bien, comenzar a pagar nuestros gastos fijos como renta o hipoteca, algunos servicios como teléfono, luz, agua, gas y más”.

FINDIS

Para poder cubrir estos dos aspectos esenciales, existen proyectos inmobiliarios exitosos, con estrategias integrales y óptimas en bienes raíces, ejemplo de ellos son ALTRA y FINDIS, quienes unen fuerzas para ofrecer modelos de inversión disruptivos enfocados en nichos específicos para poder crecer y multiplicar tu capital a través la construcción -donde siempre existe una adhesión a fideicomisos- para generar rendimientos entre 15% y 25% por año. Los proyectos para entregar flujos -o ingresos pasivos de manera mensual o bimestral- con una tasa de capitalización de al menos el doble de una renta tradicional, entre un 8% y 12% anual, enfocados co-living (Ciudad 901) para generar comunidad. 

 

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