El pasado sábado vimos como la japonesa Naomi Osaka, se convertía en una de las tenistas más jóvenes en ganar el US Open tras vencer 6-2 y 6-4 a Serena Williams, pero este logro de la nipona quedó opacado por el comportamiento de la máxima ganadora de Grand Slams en la historia. Tras ser la tenista más multada de la historia en 2012, Serena Williams no había protagonizado ningún acto susceptible de ser sancionado hasta el pasado sábado, cuando llamó “ladrón” al juez de silla, Carlos Santos, romper su raqueta y recibir consejos de su entrenador durante la final del US Open. El castigo fue de 17,000 dólares. Esta cantidad se le descontará del 1.8 mdd de premio que obtuvo por ser finalista del ultimo grande del año. La página The Tennis Space recogía que hasta 2012 la menor de las Williams había acumulado 104,500 dólares en multas, siendo la más multada de la historia hasta ese momento por delante de Bethanie Mattek-Sands (13,000 dólares) y Victoria Azarenka (7,000 dólares). Estos 17,000 dólares de multas impuestos a la finalista de esta edición del US Open no son la multa económica más elevada recibida por la tenista ni la más alta impuesta esta temporada. En el Australian Open, el alemán Mischa Zverev fue sancionado con 45,000 dólares por retirarse en el partido de primera ronda de este torneo alegando lesión. Pero la organización decidió imponer la sanción al considerar que el desempeño del alemán no estuvo a la altura de lo que implica un Grand Slam. En 2009, en un partido en US Open, Williams amenazó a un juez de línea con introducirle una pelota  hasta la garganta, tras calificar de malo un servicio suyo que le hacía perder el juego ante la belga Kim Clijsters. Esa afirmación hacia la juez de línea le costó una multa de 95,000 dólares. Con el castigo económico impuesto hace un par de días, Serena suma más de 120,000 dólares perdidos por su comportamiento antideportivo dentro de las canchas de tenis, cifra que no opaca los 27 millones de dólares que ganó el pasado año convirtiéndola en la deportista que más ganó en 2017. Este acto ocurrido con la 23 veces ganadora de Grand Slams provocó la división de opiniones sobre la actitud y multa aplicada a la tenista, órganos como la Women Tennis Association (WTA) o la International Tennis Federation (ITF) se han pronunciado al respecto, con opiniones distintas. Lee también: Serena Williams destrona a Sharapova como la atleta mejor pagada

 

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