Un porcentaje pequeñísimo de la población logra ahorrar una suma adecuada para el tan ansiado (o temido) día en que su vida laboral llegue a su fin.   El ahorro para el retiro es uno de los temas más comentados dentro de las finanzas personales, y es que la planeación a largo plazo (muy a largo plazo, en algunos casos) trae consigo grandes beneficios: una vejez cómoda, por ejemplo. Desgraciadamente, la educación en este rubro, para la mayor parte de la sociedad, deja mucho que desear, por lo que un porcentaje pequeñísimo de la población logra ahorrar una suma adecuada para el tan ansiado (o temido) día en que su vida laboral llegue a su fin. ¿Existe una fórmula perfecta para el ahorro para el retiro? Así parece, según un estudio realizado por el Buró Nacional de Investigación Económica de los Estados Unidos, junto con profesores de varias universidades del mismo país titulado: Conocimiento Financiero y 401(k) Desempeño de Inversión. Los autores midieron el conocimiento financiero de los participantes a través de 5 preguntas básicas sobre finanzas personales. Las conclusiones arrojaron que aquellos con mayor conocimiento sobre el tema tenían retornos de inversión, en promedio, 1.3% mayores (9.5% vs. 8.2%) que aquellos con menor puntuación. Aun cuando esta diferencia pudiera considerarse insignificante, se descubrió que ese 1.3% a lo largo de una vida laboral de alrededor de 30 años se convierte en un 25% más de bienes para el retiro. ¿Qué hicieron aquellos con mayor puntuación para generar un retorno mayor? Según los investigadores, estuvieron dispuestos a arriesgar: el 66% de su portafolio estuvo en acción (cotizando en bolsa) versus el 49% para aquellos que estuvieron en las últimas posiciones dentro del estudio. Los portafolios más volátiles, con el paso del tiempo, obtuvieron mejores resultados. Esta información es crítica, ya que enfatiza la importancia del entendimiento del posicionamiento estratégico de acciones: ¿cuánto de tus ahorros para el retiro debe ir a parar a la bolsa y cuánto a bonos para el gobierno? Para el analista financiero de CNN Money, Patrick Morries, la fórmula infalible tiene que ver con la Regla de 100, que sugiere que tu posicionamiento de activos versus bonos debe de ser 100 – (tu edad); es decir, a los 25 años, 75% de tus ahorros ha de ir a parar a la bolsa y 25% en bonos para el gobierno. Naturalmente, al aumentar la edad disminuye el riesgo. Lo vital de esta distinción radica en el desempeño a largo plazo de bonos vs. activos: según Morries, si en 1928 invertiste 100 dólares en bonos, para finales del año pasado su valor sería de apenas 7,000 dólares; por otro lado, si esos 100 dólares se hubieran invertido en acciones, para la misma fecha la cifra aumenta aproximadamente 40 veces, es decir, el monto total de la inversión ronda los 290,000 dólares. Ahora bien, en la bolsa la inestabilidad es una realidad, pero alguien de 30 años que no planea retirarse pronto puede soportar la presión. Sean 100 o un millón de dólares, una caída del 40% en acciones puede revolverle el estómago a cualquiera e inclinarlo a cambiar de opinión, “pero así como en la vida –afirma Morris–, en las inversiones la paciencia es clave”. Las circunstancias personales de todos son diferentes, claro está, y la tolerancia al riesgo de cada uno es muy distinta (la de alguien en sus veintes no será la misma 30 años después); sin embargo, es bastante útil saber que puedes reacomodar constantemente una parte importante de tus ahorros para mejorar los resultados dramáticamente a lo largo del tiempo y asegurar tu tranquilidad a futuro.   Contacto: Correo: [email protected] Twitter: @ComparaGuru Facebook: ComparaGuru Página web: ComparaGuru.com Blog: ComparaGuru.com   Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

Siguientes artículos

Carlos Slim compra participación en inmobiliaria Realia
Por

La venta del paquete de 24.95% de Realia en manos de Bankia se concretó por 44.48 millones de euros, lo que supone un pr...