No exagero cuando digo que el resultado de esta pelea definirá el futuro de la industria editorial digital por décadas.     Casi cualquier persona conoce a Amazon, una de las empresas más exitosas de la era de Internet y una de las marcas más reconocidas en la actualidad que creció desde orígenes humildes hace 20 años como una página que vendía libros hasta convertirse en el sitio de comercio electrónico más exitoso del mundo. Menos personas conocían a Hachette, una pequeña casa editorial fundada en Francia en 1826 que creció para convertirse en el 2004 en uno de los grupos editoriales más grandes del mundo, al menos hasta hace unos meses que ambas compañías comenzaron un pleito público sobre la venta de ebooks. Esta pelea comienza con un tema simple: cómo se establecen los porcentajes de ganancias entre la editorial y la tienda. Bajo la ley estadounidense, es el editor quien fija el precio final del ebook y la tienda negocia su porcentaje de ganancia con el editor. Si la tienda desea hacer alguna promoción o descuento debe hacerlo sobre su porcentaje. Amazon se queda con un porcentaje de 30% sobre la venta de cada ebook, el 70% restante es para el editor, que le entrega a los autores su ganancia. Recientemente, Amazon ha presionado a las editoriales para aumentar su porcentaje y bajar más el precio de los ebooks para incentivar la compra. Hachette representa muchos best-sellers de la tienda y se ha negado a reducir su porcentaje. El modelo de negocio de Amazon está basado en la venta por volumen y depende de ofrecer precios bajos para ser rentable. Para hacer presión, el portal recientemente comenzó a rechazar compras anticipadas de los libros de Hachette y a retrasar su entrega. Hachette respondió con cartas públicas en que justifica su postura en beneficio de los autores y Amazon contestó ofreciéndoles a los autores de Hachette mayores regalías mientras creó un sitio para que los autores le escriban al director de Hachette para que “deje de inflar los precios de los ebooks”. No exagero cuando digo que el resultado de esta pelea definirá el futuro de la industria editorial digital por décadas. Muchos argumentan que los ebooks deberían ser mucho más baratos porque no requieren los mismos insumos que los libros impresos, pero ése es un tema para otro día. Mientras, la pelea continúa. En medio de este pleito están los autores y los lectores. Tanja Tuma, autora y editora eslovaca, escribió en una carta abierta a ambas compañías que “si la pelea continúa, es posible que los autores se unan y no necesiten a ninguno de los dos –ni a Hachette ni a Amazon– para llegar a las mentes y corazones de los lectores. Entre más rápido resuelvan esto será mejor para todos”. Yo estoy de acuerdo con ella.     Contacto: Correo: contacto @tesseractpages.net Twitter: @TesseractPages Página web: Tesseract Pages Blog: Tesseract Pages Facebook: Leyendo más Correo: [email protected] Twitter: @mauricioangulo     Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

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