Ante la escasez de agua que enfrenta Monterrey y su zona conurbada, el presidente Andrés Manuel López Obrador llamó este lunes a que el tema no se politice y que el gobierno de Nuevo León, que encabeza Samuel García, y los empresarios se sienten a la mesa a tomar acuerdos en la materia.
En conferencia de prensa desde Palacio Nacional, el mandatario federal dijo que en caso de ser requerido, su administración está dispuesta a ayudar en las negociaciones con el empresariado y otorgar otras facilidades como exenciones fiscales a las empresas que contribuyan al abasto de agua.
“Es un asunto de definir prioridades y buscar acuerdos porque los empresarios ayudan si se les hace un planteamiento. Por ejemplo, que se les deje de cobrar el agua a quienes tienen concesiones para uso excesivo.
“O sea, si hay plantas de cualquier tipo que consumen mucha agua que reduzcan su producción y el agua la destinen a la gente. Les ayudamos en lo fiscal, pero son decisiones que deben tomarse allá”, expuso el tabasqueño.
El presidente de la República dijo que en este momento de emergencia, gobierno y sector privado deben privilegiar que la gente tenga acceso al agua buscando diversas opciones para mitigar los efectos que un redireccionamiento del recurso pueda generar a las empresas instaladas en Monterrey y zona conurbada.
“Yo siento que esta crisis es transitoria, se tienen que buscar opciones y es un periodo de sequía que está afectando, ya van a venir las lluvias. En tanto, se necesitan opciones para resolver el problema. Hay que tomar decisiones ya, pero eso depende de las autoridades locales y los acuerdos a los que se pueda llegar. Buscar que en estos casos no haya politiquería y que todos ayuden”, sostuvo.
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El pasado 13 de mayo, el gobierno federal informó acerca de una inversión de 2 mil 183 millones de pesos, de los cuales desembolsó anticipadamente 584 millones de pesos para la construcción de la presa Libertad.
Esta obra fue suspendida en noviembre del año pasado por la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa) y reanudada en enero de este año luego que se subsanaron los estudios solicitados por la autoridad ambiental.
De acuerdo con el gobernador de Nuevo León, la capacidad de almacenaje de la nueva presa será de 221 millones de metros cúbicos de agua y las obras de embalse tienen un 25% de avance total. Se prevé que la obra se concluya en 2023.
“Hay una inversión destinada a la presa Libertad para abastecer de agua a Monterrey y zona conurbada, no tengo el dato preciso, pero ya hemos transferido una buena cantidad de recursos al gobierno estatal, en Nuevo León y estamos ayudando al grado de que un funcionario de Conagua fue solicitado para hacerse cargo en el gobierno de Nuevo León del manejo del agua y cómo enfrentar la crisis.
“Estamos ayudando, no se puede de otra forma seguir apoyando, hacemos lo que se puede. Yo siento que hace falta y, lo digo de manera respetuosa, un acuerdo en Nuevo León porque se le debe de dar preferencia al consumo doméstico en una situación de emergencia se tiene que revisar y se tiene que atender primero a la gente, no el agua para las empresas”, afirmó.
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