La información todavía es confusa y las partes se resisten a hablar de ello, pero la versión de que Iberdrola podría cancelar una inversión de 1,200 millones de dólares de una planta en Tuxpan, Veracruz, añade incertidumbre a la confianza de inversionistas en el país.
En diversos medios se retomó y amplió la información que detonó el diario Reforma con declaraciones del alcalde de Tuxpan, Veracruz, Juan Antonio Aguilar Mancha (del PAN), quien lamentó la cancelación del proyecto.
Se trata de la construcción de una planta de ciclo combinado de 1,200 megavatios que Iberdrola tiene asignada construir.
La información posteriormente pareció ser confirmada por el gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García (del partido en el poder, Morena).
En un tuit, García dijo que la central eléctrica será ahora “licitada” pues es un proyecto de la Comisión Federal de Electricidad.
“Me comuniqué con nuestra amiga Rocío Nahle, secretaria de Energía, y me ha confirmado que el proyecto para Tuxpan se mantiene”.
Pero nada se ha mencionado, ni por el gobierno estatal ni federal, las verdaderas razones de la presunta salida de Iberdrola de la operación.
La empresa, valga decirlo, tampoco ha dicho nada. En comentarios a un reportero de Forbes México su área de comunicación se limitó a decir que no emitirá comentarios por ahora.
El alcalde Aguilar dijo que ya se han invertido 40 millones de dólares para la adquisición y preparación de los terrenos, así como de los permisos.
Sin embargo, diversos factores se inscriben entre las razones de la probable decisión de la empresa española.
Uno: no tiene todos los permisos. Dos: no se han dado los permisos para el suministro de gas (donde participan CFE y TransCanada, una de las empresas involucradas en el escándalo de los ductos con contratos leoninos que denunció el titular de CFE, Manuel Bartlett y que luego se desenredó por intermediación de Carlos Slim). Tres: las recientes declaraciones del presidente Andrés Manuel López Obrador de que Iberdrola es parte de un complot y una campaña en su contra.
Y mientras Iberdrola no hace declaraciones, en la Bolsa de Madrid sus acciones van en picada. En la jornada bursátil que cerró este miércoles, cuando apenas se destapó la información desde México, la empresa era una de las perdedoras entre los grandes valores industriales, con una baja de casi 2.8%.
En cuanto a México como destino de inversiones, la cosa podría ponerse más peliaguda luego de que la semana pasada se reportó que el país bajó varios sitios den Ranking de Competitividad Global de la escuela suiza de negocios IMD. Asimismo, salió de los primeros 25 lugares de preferencia de inversiones extranjeras en un listado de la consultora Kearney.
Con esto en el horizonte, las cosas podrían empeorar para quien quiere ver a México como un destino de inversiones.
