Esto a unos días de que la Secretaría de Hacienda entregó a la Cámara de Diputados los Precriterios de Política Económica para 2019, en los que el gobierno pronostica para el próximo año un mejor crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) y que los precios al consumidor alcancen su meta objetivo, aunque también prevé un menor precio en el barril de petróleo. Por otra parte, los analistas observan como los principales riesgos para la economía la renegociación del TLCAN, que en abril sostendría su octava ronda de conversaciones; las elecciones que concluirán el 1 de julio y la inseguridad que impera en el país. Así, consideran que entre los principales factores que podrían obstaculizar el crecimiento económico están la política sobre comercio exterior (26% de las respuestas), la incertidumbre sobre la política interna (23%) y la elevada inseguridad pública (12%). Lee también: Gobierno prevé mayor crecimiento y menor inflación para 2019Encuesta sobre las expectativas de los especialistas en economía del sector privado. Marzo de 2018: https://t.co/qzCr3A8rFN
— Banco de México (@Banxico) April 2, 2018
Analistas mantienen expectativa de crecimiento para 2018: encuesta Banxico
Además, los especialistas consultados por el banco central consideraron que la inflación descenderá aún más y cerrará el año en 4.09%.
Los analistas del sector privado mantuvieron su expectativa de crecimiento para el año en curso en 2.30% y a la vez pronosticaron que la inflación descienda aún más y se cierre en 4.09%, encaminándose hacia su meta objetivo de 3%.
En la encuesta a analistas del sector privado correspondiente a marzo, realizada por el Banco de México (Banxico), los economistas también redujeron a 18.60 pesos por dólar su pronóstico para el tipo de cambio al cierre del año, es decir, dos centavos menos respecto al sondeo anterior, según la mediana de las proyecciones de 35 firmas privadas locales y extranjeras recibidas entre el 22 y el 26 de marzo.
Las expectativas sobre el nivel del tipo de cambio del peso frente al dólar estadounidense permanecieron en niveles cercanos a los de la encuesta anterior para los cierres de 2018 y 2019.