Reuters.- El Fondo Monetario Internacional (FMI) dijo el viernes que el acuerdo preliminar cerrado el jueves con Argentina permite que el país revise sus duras metas de ajuste fiscal si la situación social se deteriora, aunque no precisó cuál sería el margen para modificar esa meta. “Lo que estamos contemplando es que las metas fiscales puedan ser revisadas en caso de que haya una necesidad para aumentar el gasto social”, dijo en una conversación con periodistas el jefe del FMI para el Hemisferio Occidental, Alejandro Werner. El plan es “que el Gobierno no se enfrente con un compromiso de que tenga que recortar en otra área o en otro gasto prioritario para proteger a los más vulnerables”, añadió. Los activos de Argentina subían el viernes por el optimismo entre los inversores institucionales que generó el acuerdo del Gobierno con el FMI por un acuerdo de financiación de 50.000 millones de dólares, lo que debería tranquilizar al vapuleado mercado financiero doméstico. Sin embargo, las coberturas en dólares predominaban entre los ahorristas en general y por eso el refugio en la divisa estadounidense -tradicional entre los argentinos- empujaba al peso mayorista a sus mínimos históricos. Puedes leer:  Guatemala, ¿el ejemplo para México en combate a la corrupción? “La asistencia financiera del FMI reduce la dependencia de fuentes de mercado privado más caras y menos estables, pero en última instancia, el reequilibrio macroeconómico exige cumplir con el compromiso de una reducción constante del déficit fiscal”, dijo Alberto Ramos, jefe de investigación económica de América Latina en Goldman Sachs en Nueva York. La noticia tranquiliza a un Gobierno sudamericano que en mayo tuvo que lidiar con una corrida cambiaria que llevó a una fuerte devaluación del peso y a una importante alza de tasas, lo que alimentó la ya elevada inflación y golpeará el crecimiento. Los inversores ven con buenos ojos el compromiso ante el FMI de que el Gobierno tomará dinero directamente del mercado y con esos fondos cancelará deuda con el banco central, el cual lentamente desarmará sus posiciones en letras ‘Lebac’ y dejará de transferir partidas al Tesoro, dijeron operadores. Agregaron que la plaza financiera tendrá volatilidad hasta asimilar los importantes anuncios, entre los cuales el Gobierno se comprometió a enviar al Congreso un proyecto de reforma de la carta orgánica del banco central para reforzar su autonomía.

 

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