Por: Jorge Terrazas*

La pandemia es un reto que sin duda nos pone a prueba como individuos, sociedad y país, la incertidumbre generada en cada hogar mexicano, producto del estrés generado en la microeconomía, que en mayor medida ha afectado a las personas que emprenden por primera vez un negocio y a todos aquellos dueños de pequeñas y medianas empresas que han tenido que adaptarse de forma rápida para abatir los efectos que la nueva normalidad.

México es un gran equipo, en el que las decisiones cada individuo benefician y repercuten a otros, ya que estamos ligados no solo por la geografía, sino también por la visión clara que tenemos todos para vivir en un país mejor. Desde la Industria Mexicana de Bebidas, hemos actuado con sentido de urgencia ante la tempestad, creando Cadenas Solidarias con las que le decimos a todos nuestros colaboradores, aliados, y clientes, en la ANPRAC te tomamos en serio.

Crear Cadenas Solidarias, para la industria ha sido un reto que ha requerido de la voluntad de todos los que con su dedicación y esfuerzo han participado y sostenido las operaciones en 120 plantas embotelladoras, 415 centros de distribución y múltiples oficinas en todo el país. Todo esto en defensa del sustento económico de 5 Millones de Mexicanos, que al apostar sus recursos y sueños en un pequeño negocio, tiendita o fonda buscan una forma de autoempleo.

Para quienes integran la Industria Mexicana de Bebidas, el capital humano es el elemento de mayor valor en nuestras operaciones, pues siempre hacen posible que la bebida diseñada, producida y ofrecida para los diferentes consumidores, ya sea un estudiante, una ama de casa, un empleado, un atleta, siempre estén disponibles en cualquier parte del país. Eso se logra gracias a una determinada y puntual gestión de cada uno de los colaboradores de la industria. 

En términos de innovación, con el compromiso hacia el 2024 de lograr una reducción del 31% del contenido calórico de nuestro portafolio de bebidas, las acciones de la industria se identifican por la incorporación de nuevas opciones de bebidas que hoy acompañan estilos de vida en balance. Actualmente, el 55% de los productos de la industria mexicana de bebidas son bajos y/o sin calorías, 3 de cada 10 bebidas han sido reformuladas, es decir, que contienen menos calorías y que hemos lanzado 172 nuevos productos bajos y/o sin calorías.

La pandemia ha traído grandes reflexiones sobre los problemas de salud en el país, la industria mexicana de bebidas es consciente de que cada día es mayor la preocupación y conciencia entre los consumidores por contar con productos y hábitos cada vez más saludables. Reconocemos que existe un problema de prevalencia de obesidad en el mundo y que México no es ajeno, para disminuirlo es necesario identificar todos los factores que contribuyen al desarrollo de estos males y generar estrategias integradoras que no culminen en la estigmatización exclusiva de alimentos productos o ingredientes.

Comulgamos con la idea que la obesidad es resultado de un desequilibrio energético, es decir que las calorías que consumimos son mayores a las calorías que gastamos a través de actividad física; en este sentido,  como un sector estratégico, nos hemos caracterizado por ser promotores de hábitos de vida saludables, somos una industria responsable, que reitera su compromiso de colaboración en el desarrollo de acciones integrales y campañas nutricionales para la promoción de la salud y el bienestar.

Somos una industria que ha sido estigmatizada y con datos podemos comprobarlo, los mexicanos consumimos alrededor de 500 ml diarios de bebidas saborizadas, lo que representa menos de 180 calorías de las más de 3,000 que consumimos diariamente, por lo que nuestras bebidas representan menos del 10% de la dieta del mexicano.

En ANPRAC, recientemente, como parte de las acciones para seguir colaborando por la salud de los mexicanos firmamos un convenio de trabajo con la organización civil “Queremos Mexicanos Activos” mejor conocido como QUEMA, con el objetivo de impulsar y difundir hábitos saludables, como la actividad física.

Estamos ante un entorno complicado, sí, pero también estamos frente a grandes áreas de oportunidad. Las empresas tienen la capacidad de admitir sus errores y mostrar compromisos sociales de largo plazo que generen un impacto en su justa dimensión. El papel de las empresas se está ajustando, y su rol en las Cadenas de Solidaridad es un factor clave en el fortalecimiento de nuestra sociedad, cuidado del medio ambiente y promoción del bienestar entre la sociedad y con los trabajadores, poniendo en el centro de las decisiones a las personas. En la industria Mexicana de Bebidas buscamos siempre poner al centro a nuestra gente y te tomamos en serio.

Contacto:

El autor es Director General de la Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonatadas A. C. (ANPRAC)*

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

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