Este jueves se registró un sismo con epicentro en la alcaldía Coyoacán, Ciudad de México, pero no ha sido el único, otros 20 han ocurrido en la capital mexicana. Si bien la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil asegura que estos temblores no son potencialmente peligrosos, sí son perceptibles para la ciudadanía, que los describe como “jalones” súbitos y fugaces.
De acuerdo con datos del Servicio Sismológico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en lo que va de 2023 se han registrado 21 sismos con epicentro en alguna alcaldía de la Ciudad de México. La mayor parte de estos movimientos han ocurrido en la demarcación Iztacalco, con 7 y Coyoacán, con 6, contando el que se registró hoy.
El resto de los microsismos con epicentro en la Ciudad de México han sido en Magdalena Contreras (4), Álvaro Obregón (2), Benito Juárez (1) y Miguel Hidalgo (1). Estos movimientos suelen ocurrir a baja profundidad, de ahí que sean perceptibles, y en ningún caso han sobrepasado una magnitud de 3. El más fuerte se registró el 15 de marzo en Iztacalco, con magnitud 2.8.
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Los datos del Servicio Sismológico Nacional muestran que en 2022 se registraron 26 microsismos con epicentro en la Ciudad de México. El más fuerte ocurrió el 23 de agosto, tuvo una magnitud de 3.2 y epicentro en San Pablo Oztotepec, uno de los 12 pueblos originarios que conforman la alcaldía Milpa Alta.
La alcaldía que registró más microsismos en 2022 fue Cuajimalpa, con 6; le siguió Iztapalapa con 4; Iztacalco con 3; Gustavo A. Madero con 3; Milpa Alta con 2; Tlalpan con 2; Coyoacán con 2; Venustiano Carranza con 2; Álvaro Obregón con 1 y Azcapotzalco con 1.
La secretaria de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de la Ciudad de México, Myriam Urzúa, declaró a Milenio Televisión que los microsismos son causados “por fallas geológicas locales provenientes a lo largo de la franja volcánica en donde está ubicado el Valle de México. Suelen presentarse en magnitudes muy pequeñas y pueden generar aceleraciones que los hacen perceptibles solamente en las zonas próximas al microsismo”.
“La aceleración es tan baja que no se producen daños en las cimentaciones como sí lo hacen los grandes sismos”, declaró la titular de Protección Civil.
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