La Confederación General del Trabajo (CGT), principal central sindical de Argentina, criticó este miércoles el ajuste fiscal y recorte del gasto público anunciado por el Gobierno de Javier Milei, ya que sostiene que “lo paga el pueblo y no la casta”.
“El plan de ajuste fiscal y cambiario anunciado por el Gobierno generará una fuerte aceleración del proceso inflacionario que dinamitará el poder adquisitivo de los salarios de los trabajadores”, indicó la CGT en un comunicado, tras una reunión convocada tras conocerse las medidas detalladas por el ministro de Economía, Luis Caputo, en la víspera.
Las medidas anunciadas este martes por el titular del Palacio de Hacienda para intentar paliar la crisis y estabilizar la economía fueron tomadas por la central obrera como “disciplinador social” y apuntaron que “ahogarán a las provincias”.
“De acuerdo a lo pronosticado por las propias autoridades económicas del actual Gobierno, las medidas anunciadas ubicarán el índice inflacionario mensual entre un 20% y un 30%, (…) pondrá a millones de argentinos en una situación socioeconómica desesperante, sin garantías de poder acceder a sus necesidades básicas”, aseguraron en el documento.
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La inflación interanual se elevó en noviembre a un 160.9%, después de que la mensual -última del Ejecutivo del peronista Alberto Fernández- fuese del 12.8%, algo que se espera se acelere en los próximos meses.
Entre las primeras decisiones económicas del Ejecutivo se encuentran la reducción de subsidios a la energía y el transporte público; el recorte de recursos enviados por Nación a las provincias y la devaluación de un 50% del peso argentino, que llevó la cotización oficial del dólar de 400 a 800 pesos.
Para uno de los cotitulares de la CGT, Héctor Daer, todo esto se trata de un “gobierno desordenado”, donde “se anunciaron medidas absolutamente vagas”, en la que “no se habla de ingresos, pero sí de ajuste”.
“Cuando habla de sacar los subsidios, está hablando de multiplicar por tres cada una de las tarifas, no se habla de ingresos ni cómo se va a resolver el tema de los sectores más vulnerables. Vemos que no hay plan económico, lo único que existe es un aumento de impuestos que van sobre la industria”, expresó Daer a la prensa a la salida de la reunión.
Por último, la CGT no se quedarán “de brazos cruzados”, pero seguirá teniendo “vocación de contribuir a la gobernabilidad”.
“Consideramos imprescindible una convocatoria al diálogo de parte de las autoridades gubernamentales”, cerró el comunicado.
Con información de EFE
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