El gigante asiático firmaría a partir del próximo año el primero de varios contratos por ocho nuevos reactores nucleares de Westinghouse Electric.    Reuters PEKIN – China firmaría desde el año próximo el primero de varios contratos por ocho nuevos reactores nucleares de Westinghouse Electric Co, en momentos en que el Gobierno sigue adelante con la mayor expansión en materia de energía nuclear para uso civil desde el desastre del 2011 en la planta japonesa de Fukushima. Las principales compañías de energía nuclear de China avanzan en las negociaciones para comprar los tres reactores de tercera generación Westinghouse AP1000, dijo Timothy Collier, director ejecutivo para China de la compañía estadounidense. Se espera que los ocho proyectos, que incluyen maquinaria y servicios, tengan un costo de 24,000 millones de dólares. “Estamos actualmente en varias etapas de negociaciones para ocho unidades nuevas”, dijo Collier a Reuters. La japonesa Toshiba Corp es la propietaria mayoritaria de Westinghouse. China tiene actualmente 20 reactores nucleares en operaciones y otros 28 en construcción, mientras busca reducir su dependencia en costosos y contaminantes combustibles fósiles para generar electricidad. Sun Qin, presidente del operador nuclear China National Nuclear Corp (CNNC), recientemente declaró que podrían construirse otros 20 reactores nucleares en los próximos seis años. Los ocho reactores Westinghouse se construirán en cuatro ubicaciones, entre ellas Sanmen, en la costera provincia de Zhejiang, y en Haiyang, en la nororiental provincia de Shandong, donde se están construyendo otros cuatro reactores Westinghouse AP1000. La primera unidad en Sanmen estaría conectada a la red en el 2015, dijo Collier. CNNC y China General Nuclear Power Group también mantienen negociaciones para comprar cuatro reactores adicionales, que serán construidos en Xudapu, en la provincia de Liaoning, y en Lufeng, en la sureña provincia de Guangdong, agregó Collier. Los proyectos ya fueron aprobados por el Gobierno.   La expansión nuclear de China está atrayendo muchos proveedores de maquinaria, como las firmas energéticas francesas Alstom SA y Areva. Candu Energy Inc., una subsidiaria de SNC-Lavalin Group, también trabaja con CNNC para comenzar a convertir dos reactores Candu 6 en Qinshan, en la provincia de Zhejiang, para quemar combustible de uranio reprocesado. China suspendió en el 2011 la aprobación para nuevas plantas de energía nuclear por más de un año y ordenó exhaustivos controles en todas las estaciones operativas luego de que un poderoso terremoto y posterior tsunami provocaran graves daños en Fukushima.

 

Siguientes artículos

Tras espionaje de EU, países buscan proteger Internet
Por

Esta semana durante la conferencia NetMundial en Sao Paulo será aprobado un documento que defiende la gobernanza multise...