En los últimos años el storytelling se ha convertido en una herramienta imprescindible de la comunicación, el entretenimiento y la comunicación. Ha tomado relevancia y protagonismo gracias a las redes sociales, principalmente porque a la gente nos gusta leer, ver y escuchar historias, y es la manera en la que nos comunicamos desde hace siglos: contando historias.
De acuerdo con Juan Burgos, director de Think Mercadotecnia, es necesario enfocarse en “hacer visible lo invisible por medio de las palabras, imágenes o mensajes audiovisuales, y dar sentido a la información en un contexto específico”. Es decir, que el receptor o público meta vaya de un punto A a un punto B para informarse, divertirse o enterarse de una situación o suceso en particular.
El storytelling es la forma más completa de comunicación, que se puede desarrollar gracias a la conjunción de la narrativa con el uso de la tecnología; razón por la que ha logrado posicionarse como un poderoso instrumento de mercadotecnia en todos los sectores de la sociedad, estratos sociales, e incluso trasciende brechas generacionales.
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Sin embargo, muchas veces no hay sentido de la estructura en el desarrollo del storytelling, porque se cree erróneamente que es lo mismo que mercadotecnia, una moda, o la manipulación de emociones para vender algo.
Todos tenemos una historia que contar, ya sea personal o profesional, y para comprender mejor el desarrollar una historia, o convertirnos en storytellers, Juan Burgos Franco nos comparte los siguientes pasos.
Definir el mercado objetivo
“Esto te ayudará a definir los temas, el tono y la forma en que deberás expresarte. No es lo mismo dirigirte a un adolescente que a un empresario”.
Muestra dominio del tema
“Tienes que prepararte muy bien para que muestres seguridad y te sientas cómodo contando lo que tu negocio hace, los servicios que ofreces, hablando de sus beneficios y de los problemas que resuelve”.
Logra una conexión emocional
“Esto se consigue a través de palabras, frases y actitudes de empatía y pertenencia. Las palabras importan y es importante saber dónde las vas a colocar y en que tono, para llamar la atención y generar esa conexión emocional”.
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Manejo de información
“Es importante dar la información, saber administrarla, tener un proceso que vaya de lo general a lo específico. Típicamente tenemos una introducción, desarrollo y conclusión; aunque a veces puedes empezar por la conclusión, y sustentarla poco a poco a lo largo de la historia”.
Practica, practica, practica
“Debes contar muchas historias varias veces para ver qué funciona y qué no. No hay una fórmula específica ni una estructura definida para contar historias. Con la práctica vas a encontrar tu estilo y vas a poder dominar los temas que tú manejas para que todos los que te escuchen los entiendan tan bien como tú los entiendes”.
El storytelling es una herramienta de comunicación muy poderosa. Es importante saber cómo y cuándo usarla para que funcione a favor de nuestros negocios, sin importar el tamaño, la industria o el giro en el que estemos. En resumen, “la práctica hace al maestro”.
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