- 31 entidades federativas no garantizan que lleguen todos los niños a primero de preescolar (excepto Tabasco).
- 18 entidades federativas no aseguran la formación idónea de los futuros maestros (Campeche, Coahuila, Chiapas, Guerrero, Durango, Michoacán, Morelos, Nayarit, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala y Yucatán).
- 15 entidades federativas, es decir la mitad, no fomentan la participación activa de las familias en la escuela (Baja California Sur, Chiapas, Coahuila, Durango, Estado de México, Guanajuato, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Oaxaca, Querétaro, Sonora, Tamaulipas, Tlaxcala y Yucatán).
- 8 estados no garantizan que las escuelas cuenten con un líder escolar de tiempo completo (Chiapas, Guanajuato, Michoacán, Oaxaca, Puebla, San Luis Potosí, Veracruz y Zacatecas).
- 7 estados no ofrecen espacios recreativos suficientes en las escuelas (Chiapas, Campeche, Guerrero, Jalisco, Quintana Roo, Tabasco y Veracruz).
- 29 entidades no registran acompañamiento de tutoría a sus maestros (excepto Aguascalientes, Campeche y Zacatecas).
- Ninguna entidad cumple con su obligación de atender adecuadamente a niños con necesidades educativas especiales.
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Tenemos que variar la fórmula y proceder a cambiar, a fondo, nuestro sistema educativo y el de cada entidad de la República. No hay de otra. Si en verdad privilegiamos el derecho de los niños, no sólo de palabra sino en los hechos, tenemos no sólo que seguir adelante con la reforma educativa, sino acelerar el paso. La reforma educativa no es el problema, es la solución. Tenemos que encontrar el modo para, sin violencia, sin afectación de los derechos humanos, con serenidad y cuidado, pero también con firmeza, seguir adelante con la transformación de nuestro sistema educativo. En el ir y venir de los días, en las declaraciones y los acontecimientos, es fácil perder perspectiva y olvidar a quién y a qué nos debemos los que buscamos una mejor educación. Nos debemos a las niñas y niños y al ideal de un mejor futuro para ellos y para nuestro país. Las cosas empiezan a cambiar, pero se llevará mucha persistencia, serenidad, eficacia y coherencia para cambiar nuestro sistema. No será fácil, pero bien vale la pena el esfuerzo. Si somos exitosos, cambiamos a México para bien. Y estoy seguro de que eso es lo que todos queremos. Contacto: Correo: [email protected] Twitter: @ClaudioXGG / @Mexicanos1o Página web: Mexicanos Primero Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.