Una amistad de 17 años ha producido algunas de las empresas tecnológicas más populares. ¿Cómo ha logrado este par ser tan productivo?   Por JJ Colao   Kevin Ryan y Dwight Merriman han construido juntos tres empresas multimillonarias, una tarea que, por lo visto, es más fácil de hacer que de explicar. Sentados en sillas recubiertas de pieles de algún animal lanudo, en una sala de conferencias con paredes de cristal en la sede de Gilt Groupe, en Park Avenue, el dúo busca analogías. “Es como si uno de nosotros fuera un corredor y el otro receptor abierto”, sugiere Ryan, un sujeto delgado y quebradizo de 49 años y encargado de consumar las operaciones. “O tú eres el coordinador defensivo y yo me mantengo alejado de esas cosas”, responde Merriman, un virtuoso de la tecnología de 44 años. Tal vez son como las dos líneas de la doble hélice que se complementan entre sí, pero no se enredan. Sea cual sea el secreto de su alianza de 17 años, ha producido algunos éxitos notables. DoubleClick, cofundada por Merriman y dirigida por Ryan, más o menos inventó la publicación de anuncios en línea; fue adquirida en 2005 por inversionistas de capital privado por 1,100 millones de dólares (mdd) (y vendida tres años más tarde a Google por 3,100 mdd). Desde entonces el dúo ha lanzado cinco empresas, dos de ellas destacan: Gilt Groupe, especializada en moda de alta gama, decoración del hogar y ofertas locales en línea, y 10gen, que vende software y servicios para empresas de la talla de Cisco, MTV y Salesforce.com. Si usted cree en las valuaciones del mercado privado, entonces ambas empresas tienen un valor aproximado de 1,000 mdd o menos. Por supuesto que ha habido fracasos. Los socios perdieron dinero en Panther Express, un emprendimiento de tecnología de video, que se fusionó con CDNetworks en 2009; el buscador de comercio electrónico ShopWiki.com, vendido por una pequeña ganancia hace un par de años; Business Insider, el medio de comunicación en línea —dirigido por Henry Blodget, un controvertido ex analista de acciones convertido en blogger— es todavía más fama que éxito: el año pasado perdió 3 mdd tras ingresos de 12 mdd, a pesar de que recientemente reportó ganancias y recaudó 5 mdd del CEO de Amazon Jeff Bezos. Una poderosa confluencia de tecnología y medios de comunicación unió a estos chicos. El hijo de un ejecutivo de Caterpillar, Ryan creció en Roma y Ginebra antes de que su familia se instalara en Chagrin Falls, Ohio. Su currículum fue diseñado para la alta dirección: estudió Economía en Yale, banca de inversión en Londres, maestría en Insead, en Francia. Después de trabajar en el departamento de finanzas de Disney buscó liderar un cambio en United Media, un sindicador de columnistas y tiras cómicas, en 1995. Su logro principal: crear la muy popular página web Dilbert.com. Merriman, por su parte, ha sido entrenado para programar desde la adolescencia. Él compró su primer ordenador, un TI-99/4A, cuando tenía apenas 14 años, en Middletown, Ohio. Se enganchó al código desde ese día. “De repente eran las 3 de la mañana y yo seguía tecleando”, dice riendo. “Para mí fue muy claro que es lo que quería hacer por el resto de mi vida.” Después de estudiar ciencias de la computación en la cercana Universidad de Miami, se unió Intercomputer Communications, una compañía de redes en Cincinnati fundada por Kevin O’Connor. Cuando ésta fue vendida a Digital Communications Associates, Merriman siguió a O’Connor hasta la nueva oficina en Atlanta. Tres años más tarde, en 1995, DoubleClick nació en el sótano de O’Connor. Él y Merriman creron un sistema para mostrar banners publicitarios a través de una red de 30 sitios y dar seguimiento a su rendimiento mostrándolos con precisión a los visitantes. Eso llamó la atención de Ryan, que quería poner en marcha su propio negocio de publicidad en línea. Él lo pensó mejor después de reunirse con el equipo de DoubleClick en Nueva York: “Me fui y pensé: ‘simplemente debo unirme a ellos.’” Aunque los fundadores refinaron la plataforma, Ryan —primero como director de finanzas, luego presidente— se hizo cargo de las finanzas, reclutó al talento y estableció sistemas internos. DoubleClick salió a bolsa en 1998. Cuando Ryan se convirtió en CEO en 2000, las acciones se dispararon ocho veces hasta 135 dólares y los ingresos aumentaron a 500 mdd. Luego vino el desplome. Las acciones de DoubleClick cayeron a 11 dólares a finales de 2000. Las pérdidas alcanzaron un máximo de 266 millones en 2001, mientras que las ventas cayeron a 270 millones dólares dos años después. En siete rondas de despidos Ryan recortó a 700 empleados. Las quejas de los clientes relacionadas con la privacidad provocaron una investigación de la Comisión Federal de Comercio (FTC) y otra dirigido por el entonces procurador de Nueva York, Eliot Spitzer. Mientras que la FTC no encontró nada, DoubleClick alcanzó un acuerdo con diez estados por 450,000 dólares, sin admitir irregularidades. Merriman y Ryan la vendieron en julio de 2005, llevándose cada uno 29 mdd. ¿De qué manera las ideas de los socios se convierten en startups? Un poco al azar. “Como han trabajado juntos durante tanto tiempo, tienen conversaciones de muy alto nivel”, afirma Chip Hazard, socio de Flybridge Capital Partners, inversionista en 10gen. Los dos comienzan a menudo por trazar las tendencias a largo plazo en un pizarrón, y luego trabajan los detalles hacia atrás para detectar una oportunidad. “Puede que lleguemos en la misma página”, dice Merriman, “pero nos nivelamos rápidamente”. Y se aventuran, siempre inyectando cada uno 250,000 dólares en capital semilla, una estrategia que Ryan admite que los ha excluido de rondas de riesgo más lucrativas en etapas posteriores. Los dos se establecieron en la idea de Gilt, adoptando el modelo de ofertas de un solo día establecido por Vente-Privee, una sitio francés de comercio electrónico en abril de 2007. Contrataron a un equipo en el verano y se pusieron en marcha en noviembre con 5 mdd en capital de riesgo. Gilt pasó de 25 mdd en ventas en 2008 a 450 mdd en 2011, cuando recaudó otros 138 mdd para alcanzar una valuación de 1,000 mdd. La compañía ha caído desde entonces. A pesar de que Gilt tuvo ganancias el año pasado, Ryan ha despedido al 10% de la plantilla después de varios intentos fallidos de venta de bienes a precio completo. Tanto Gilt Taste (un sitio de comida gourmet) como Park & ​​Bond (ropa para hombre) han cerrado. Su negocio de paquetes de viajes, Jetsetter, fue vendido a TripAdvisor por una suma no revelada. “Gilt ha caído en desgracia con casi todos sus intentos por generar la próxima generación de la moda al por menor”, dice Sucharita Mulpuru, analista de comercio electrónico de Forrester Research. Pero con sus ingresos estables todavía podría valer más de 1,000 mdd. Ryan y Merriman coinciden en que 10gen es la joya de su cartera. Cofundado con el veterano de ShopWiki, Eliot Horowitz, 10gen gestiona una base de datos de código abierto, MongoDB, que ayuda a los desarrolladores a integrar enormes bancos de datos más fácilmente en las aplicaciones de software. Los investigadores del CERN se basaron en MongoDB en su búsqueda del bosón de Higgs, y MetLife lo ha utilizado para combinar millones de estadísticas en una herramienta para los agentes de servicio al cliente. El servicio cuesta 5,000 dólares por servidor al año por concepto de seguridad y copias de seguridad, más capacitación y consultoría, 10gen acumulará unas cuantas decenas de millones en ventas este año. “Están en un sitio muy bueno”, dice Merv Adrian, un analista de base de datos de Gartner. “¿Una empresa multimillonaria un día? Es posible”, opina Adrian. Con Merriman pasando “99.9%” de su tiempo en 10gen y Ryan considerando nuevos proyectos en las áreas de educación, seguridad informática, comercio electrónico, incluso quizá organizaciones sin fines de lucro, ¿el dúo finalmente se estará separando? “Ya que no hay sociedad oficial, no hay nada que cambiar”, dice Ryan. “No partimos de la premisa de que tenemos que hacer todo juntos.”

 

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