La contingencia sanitaria provocada por el crecimiento exponencial de casos de Covid-19 en todo el mundo ha provocado que las autoridades llamen a la suspensión de clases, a las personas a quedarse en casa y a ejercer el distanciamiento social como una de las medidas principales para tratar de aplanar la curva de contagios.

Como resultado, el tráfico en Internet a nivel mundial ha aumentado de manera considerable, casi un 25% a partir de los decretos de cuarentena, sobre todo en Europa. Por tal motivo, Netflix, Youtube y demás plataformas que ofrecen contenido como películas, series o videojuegos en streaming, han decidido bajar la velocidad de tasa de transferencia, ya que debido a la demanda, están presentando problemas de conectividad.

Por ello, las redes sociales y las plataformas digitales se han convertido en centros de información sobre la pandemia. De acuerdo con ComsCore, durante los últimos 30 días en México, 1 de cada 4 búsquedas en la red incluyó las palabras “coronavirus” o “Covid-19”, generando un incremento casi del 6 mil por ciento.

No obstante, ello conlleva un peligro en sí mismo, ya que no sólo es posible encontrar información oficial y de fuentes confiables, sino abundan las noticias falseadas que sólo buscan confundir a la población, ya sea para generar tráfico en sitios publicitarios, para crear posturas políticas o para robar datos de los usuarios.

De hecho, en un estudio previo que hizo el Reuters Institute de la Universidad de Oxford, durante 2019 México se encontró en segundo lugar a nivel mundial en tráfico de noticias falseadas, sólo por debajo de Turquía.

En un reciente estudio publicado por ComScore se observa claramente como las empresas de medios tradicionales recuperan credibilidad digital durante la pandemia del Covid-19, un lugar que habían cedido a las redes sociales y a portales informativos. Así, las razones por las que los medios de comunicación recuperan terreno es por posibilidad de hacer investigaciones mucho más profundas y profesionales, además de generar contenido propio y original.

Además, la correcta utilización del lenguaje periodístico, la verificación y utilización de fuentes oficiales y la seriedad de los trabajos han logrado posicionar a las empresas de comunicación como un referente informativo durante la contingencia sanitaria.

Ello, aunado a una correcta utilización de las redes sociales como amplificadores de mensajes, han logrado que las empresas de medios de comunicación recuperen los espacios que habían cedido a portales y líderes de opinión digitales, lo que representa una oportunidad para posicionarse en segmentos de la población en los que no figuraban como primera opción de contenidos.

 

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