Investing.com.- Warren Buffett permanece callado ante la crisis económica que ha provocado el caos económico mundial y que, para la práctica totalidad de los expertos, será peor que la que vivimos en 2008. En ese periodo, el oráculo de Omaha se caracterizó por dar recomendaciones y anunciar a bombo y platillo cada movimiento de inversión que hacía, enviado un mensaje de optimismo a inversores de todo el planeta, que podían interpretar, en base a sus movimientos, que todo iba a ir bien. Su famosa frase en dicha ocasión fue: “Ten miedo cuando los demás muestren codicia, y sé codicioso cuando a los demás les entre el miedo”.

Pero en esta ocasión, se ha impuesto la ley del silencio en la principal voz de Berkshire Hathaway (NYSE:BRKa). La compañía publicó una nota de prensa anunciado que Buffett no iba a hablar en público hasta mayo, una decisión acertada si nos acogemos a la idea de que, con 89 años, el multimillonario estadounidense se encuentra entre la población de riesgo. Pero, al mismo tiempo, son muchos los que echan en falta sus sabias palabras para poder reconocer qué es lo siguiente que pasará en el mercado. No en vano, gracias a sus acertadas decisiones de inversión es hoy día la cuarta mayor fortuna del planeta.

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El consuelo que nos queda es aplicar el ‘legado’ que nos dejó en la anterior crisis, cuando, siendo testigo de lo que sucedía con los bancos, invirtió 5.000 millones de dólares en Goldman Sachs (NYSE:GS) y otros 5.000 millones en Bank of America (NYSE:BAC), además de pagar 3.000 millones en General Electric (NYSE:GE). Obtuvo cuantiosos intereses y garantías por ello, aumentando su fortuna en más de 10.000 millones de dólares. También recomendó, prensa mediante, mover el efectivo y apostar por valores norteamericanos, no sin reconocer, eso sí, que no tenía manera de saber, con la crisis que vivíamos, cómo iba a terminar la cosa. “La liquidez es el peor de los activos, no te da nada y puede depreciar su valor. Y las acciones acabarán subiendo en la próxima década, y en un grado aceptable”. El tiempo acababa dándole la razón: en 2020 hemos visto al Dow Jones cerca de los 30.000 (frente a los 6.500 puntos de marzo de 2009).

Si no queremos preocuparnos, además, podemos sustituir sus palabras por los números que conocemos de Berkshire que, a cierre de diciembre, situó su efectivo y equivalentes en 125.000 millones. O buscar en sus últimos movimientos, que tampoco son muy lejanos. A mediados de marzo, por ejemplo, ganó 390 millones vendiendo participaciones de Delta Air Lines (NYSE:DAL) y Southwest Airlines, y lo hizo dos días después de asegurar, en una entrevista a Yahoo (NASDAQ:AABA) Finance, que no iba a vender acciones del sector aéreo. También vendió 31 millones de su posición en Bank of New York Mellon (NYSE:BK).

Quizás también quiere que su silencio de voz llegue a nuevas generaciones de inversores. En este sentido, podemos analizar los comentarios realizados por Bill Ackman, fundador de Pershing Square (NYSE:SQ) Capital Management, y ‘pupilo’ de Buffet, además de inversor de la propia Berkshire. En una entrevista a la CNBC el pasado 18 de marzo, aseguró “aunque me había mostrado bajista con los valores, ahora soy alcista, y estoy comprando de forma agresiva”. Un ejemplo lo puso en el grupo hotelero Hilton, que ha perdido valor hasta los 50 dólares por acción, frente a los 120 anteriores. También Starbucks (NASDAQ:SBUX), Lowe’s, Agilent, o incluso Berkshire. “Un buen valor en estos momentos”, añadió (y como ven, muchos valores relacionados con el sector de la hostelería, que podría volver a repuntar cuando la economía se reactive).

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William D. Cohan, periodista de Vanity Fair, le preguntó recientemente el porqué del silencio de Buffet. La respuesta de Ackman fue que Buffett mantenía su intención de realizar el encuentro previsto para el 2 de mayo -aunque el 13 de marzo ya confirmó que sería en streaming-. Y sobre lo que le ocupaba en estos momentos, sentenció que sospechaba que estaría moviendo sus 125.000 millones de efectivo a trabajar comprando empresas, pero manteniendo un perfil bajo para asegurarse de que los valores permanezcan baratos.

Un argumento que tendría sentido si observamos a las últimas declaraciones de Charlie Mungler, vicepresidente de Berkshire Hathaway, que se destapaban en un artículo en The Wall Street Journal. “Warren quiere mantener Berkshire a salvo para todos aquellos inversores que tienen el 90% de su valor invertido en la compañía. Siempre vamos a ir sobre seguro. Eso no significa que no podamos hacer algún movimiento agresivo o aprovechar la oportunidad. Pero la idea se ser conservadores ahora mismo, para salir de esta más reforzados”.

El último punto interesante nos lo ofrecen en Seeking Alpha. Allí aseguran que en la crisis financiera de 2008 fue muy activo porque estaba en una situación de necesidad, y no de oportunidad. Pero que ahora, la situación es muy distinta. “Ahora posee mucha más flexibilidad financiera y no tiene necesidad de invertir como antaño. Además, es prácticamente imposible encontrar negocios con valor que ahora no lo estén pasando mal. Quizás el momento llegue cuando todo se empiece a recuperar y todos tengamos una visión más clara de cómo será la realidad al otro lado del valle económico”.

Por Sara Busquets

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