Por Liz Basañez*

Todos hablamos de amor, todos lo hemos sentido (de forma fraterna, romántico, desinteresado, etc.) pero también hemos dicho o escuchado a alguien decir que es lo más complicado de entender y en la esfera romántica, hemos tenido un desamor o hemos sido el de alguien más. Pero déjame enfocar al amor romántico.

Más frecuentemente de lo que quisiéramos, lo que nos tiende a unir a una pareja son las carencias, soledad y/o miedos, disfrazado de idealización y fantasía.

Más frecuentemente de lo que deseamos.

Es común escuchar que el amor es lo más importante para iniciar y mantener una relación de pareja.

¿Lo es?

Yo quiero poner en la mesa más elementos indispensables para mantener una relación sana.  El enamoramiento nos suele llevar a la idealización del otro. Craso error comprárnoslo y tomar decisiones bajo ese estado.  La contraparte es la admiración, el ver al otro con sus defectos y aún así aceptarlo/a.  Es tan necesaria en el inicio y mantenimiento de una relación de pareja, pero y no con el ensueño de la idealización, que puede llegar a rayar en lo irreal.

Pero mira, te menciono otros más para una relación saludable:

Confianza. Que tu pareja no descubra información relevante tuya en una reunión con otros o por terceras personas.

Aceptar al otro. Que no se sienta extraño en nuestra vida.

Respeto y responsabilidad.

Negociación e imparcialidad.

Aceptar al otro como es.

Jamás esperar que el otro resuelva tus problemas. La codependencia es un cáncer para la relación de pareja.  El objetivo es que no haya dependencia, codependencia sino interindependencia.

Pasar a tiempo a solas y en conjunto.

Equidad. Si uno de los dos “tiene piernas más largas” (económicamente, en alguna habilidad, en elementos a compartir) no se puede pedir a ambas partes “correr a la misma velocidad y la misma distancia.

Reciprocidad. Si no se interesa o hace caso omiso en tus intereses a pesar de que se lo pidas, no te va a llevar a buen puerto.

Hay pacientes que me preguntan si realmente afecta el tener una relación de pareja con muchos años de diferencia. Mi respuesta siempre es esta: para que una relación de pareja esté bien (además de los elementos que te comenté al inicio) se necesita interindependencia, si yo estoy bien y tú estás bien, entonces los dos estamos muy bien.  Se necesita que por separado cada uno esté satisfecho y completo por sí mismo para que al unirse esté bien la pareja.  Esto es tan factible en una relación con pocos o nulos años de diferencia como en una relación con varios o muchos años de diferencia.

También es necesaria la sincronicidad de temperamentos, no quiere decir que los dos tengan el mismo temperamento, sino que se complementen. Y por supuesto, que exista similaridad entre ambos, es decir, que tengan acompañamiento en su nivel socio cultural o inteligencia o ambos. No necesariamente tienen que estar los dos, pero estadísticamente favorecen un mejor pronóstico.

Con el amor no basta…

Claro que el amor es necesario y favorable, pero no suficiente.

¿Sabes también qué es recomendable hacer con tu pareja?

Darle APOYO en frente de otros

NO INTERRUMPIR

NO MINIMIZAR (ni en público ni en privado). Ejemplo, hace muchos años Sarah Jessica Parker solía criticar a su entonces esposo, Mathew Broderick.  No fue extraño que tiempo después terminaron divorciados.

COMPARTIR PENSAMIENTOS y SENTIMIENTOS, eso genera confianza y estar compenetrados

HISTORIA y REGISTROS. Es bueno tener álbumes, portarretratos, recuerdos gráficos que puedan ser recordatorios constantes de su relación.

PASAR TIEMPO JUNTOS Y SOLOS

“La intimidad no solo es física, también es el acto de conectar con alguien tan profundamente que puedes sentir que tocas su alma”       Liz Basañez 

Te voy a hacer una pregunta, ¿eres de los que piensa que la pareja es ‘hasta que la muerte nos separe’ o ‘hasta que el amor termine’?

Porque existe un concepto que llamado Efecto Miguel Ángel que dice que es más importante el buscar el bienestar de mi pareja, porque si ella está bien me dará lo mejor y entonces yo estaré también mejor. Que, aunado a la sabiduría budista, que van en la misma línea, que dice que es importante moverte bajo el egoísmo sabio, que dicta que deseemos el bien del otro porque eso provocará el bien propio al desear lo positivo para los demás. En lugar del egoísmo necio, que busca solo el propio bienestar, independientemente del de los demás.

Por último, te voy a hacer una última pregunta, ¿con qué tanta frecuencia favoreces los sueños, necesidades, anhelos o potencia de tu pareja A PESAR de los momentos de molestia o estrés?

“Quiérete tanto que cuando alguien te trate mal te percates inmediatamente”         

 

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*La autora es Psicóloga Cognitivo Conductual.

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

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