A diario, de una u otra forma, todos hacemos negociaciones. Aceptamos o no propuestas, establecemos límites y requerimientos mínimos para que, ciertas situaciones bajo nuestro control sucedan o desaparezcan. En ese baile, a veces hay “Bezos”. Los estilos para negociar de cada individuo, y en conjunto como organización, están ligados a las más diversas experiencias, personalidades y a lo que cada quien valora. Hay personas y/u entidades que, con tal de alcanzar una meta, guarda silencio, o presenta verdades a medias o manipula, a clientes/empleadores/audiencia. Hablamos con frecuencia de la ética empresarial, pero ¿qué tan nítido tenemos nuestros puntos de quiebre, o el de nuestro equipo más cercano? ¿Cuál es el mensaje que, a través de nuestros actos, establecemos como criterios esperados de comportamiento para nuestros colaboradores? Si en tu organización se dan chantajes, es porque probablemente tú también colaboras en ello. El chantaje velado, la manipulación sutil y la extorsión, están presentes todos días, a todos los niveles, desde el núcleo familiar. Sólo esperemos a la época Navideña o celebración del día de las Madres para verlo en acción. La raíz de nuestras acciones es tan íntima y profunda que, por eso hoy, la clase la da Jeff Bezos. Bezos asume el costo de decisiones personales para quitarle poder de negociación sobre él a Enquirer. Establece un precedente de “alto al bulling”, mediático, político e inclusive empresarial. Y como bien dice, está en la posición de poderlo hacer. Me pregunto quién será el siguiente valiente en querer chantajearlo. Hoy, para los que conocemos al CEO de Amazon sólo a través de los medios, tenemos una imagen ejecutiva de responsabilidad sobre las consecuencias con tal de mantener su libertad de expresión. Establece un precedente de cómo se espera dentro de la organización Amazon la conducción de los negocios. Manda un mensaje sobre responsabilidad en los propios actos, la ética personal y la convicción de ideas. Simbólicamente grita: “no porque alguien llegue a amenazarme de publicar lo que resultará vergonzoso, diré algo que apoya la política de alguien más”. Habiendo colaborado en áreas de marketing, sé por experiencia propia que hay golpeteo mediático por parte de algunos medios de comunicación hacia las marcas, para obtener pautas publicitarias. También, he escuchado un interesante proceso de asignación de preguntas en las conferencias de prensa mañaneras, o las promesas de fama o promociones a personas dispuestas a hacer favores sexuales. Y no entremos en los procesos de negociación de los Congresos, o la FIFA. Sólo nosotros aceptamos participar en estos bailes, en vez de asumir los costos de salirnos de ellos. ¿Qué será más fácil a la larga? Porque bailar, también conlleva costos. La imagen de la ética personal se ve reflejada en la forma de negociar, tratar a los demás, límites y delimitaciones que establecemos.   Contacto:
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