Por: Manuel Del Valle

Ayer, por primera vez y después de casi 10 años de un intento frustrado, dos cirugías de espalda y muchas horas de terapias, logré correr un medio maratón. Logré terminarlo en 2 horas 26 minutos, lo cual, creo que es bastante aceptable considerando que decidí inscribirme a este apenas hace 2 meses y medio. Uno de mis detonantes para participar, fue que llevaba ya unas semanas intensas de trabajo y viajes que no me habían dejado hacer ejercicio como yo quisiera, a continuación, les cuento por qué…

Llevo muchos años intentando crear rutinas mañaneras que me permitan empezar el día con meditación, ejercicio, lectura o aprendizaje, para después arrancar con toda la energía junto con mi esposa, a preparar desayunos y lunches, dejar a mis hijos a la escuela y regresar a trabajar desde casa o a la oficina. Ya leí y apliqué “El Club de las 5A.M.”y también el Mini curso de “Gana tus mañanas” con Oso Oswaldo Trava. Puedo decir que ambas plataformas me han funcionado extraordinariamente bien, sumado con algunas apps como Headspace y Fabulous; son combinaciones ganadoras, sin embargo, hay algo que les falta a estas plataformas y aplicaciones, y que creo que hasta ahora nadie ha logrado descifrar: los cambios no programados, las disrupciones. Algo que estoy seguro nos ha sucedido a muchos, una vez que logramos dominar una rutina o crearnos un hábito, llega algo que lo interrumpe o lo cambia abruptamente.

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¿Y qué pasa con estas disrupciones? Son parte de nuestra vida, querámoslo o no, la vida evoluciona, todo cambia, y vivimos en un mundo Híbrido, donde la misma actividad, puede realizarse en diferentes espacios, o utilizar el mismo espacio para diferentes actividades. Desde vacaciones, viajes no programados, cambios en las dinámicas familiares o eventos que quizá no se puedan prever con tanta anticipación. ¿Qué hacer ante esto? La respuesta es: propósito, rituales, aprendizaje y adaptación ¡Así, en ese orden!

En las semanas de trabajo, estos cambios suceden constantemente, pero no a la vista de todos, estos cambios se dan, de manera individual, en los lugares donde todos los días, la gente desarrolla su semana de trabajo, casa, gimnasio, oficina, restaurantes, etcétera… Y hoy, con la implementación del trabajo híbrido, hay algo que muchos directivos de empresas grandes, medianas y pequeñas, están olvidando y me refiero a conocer las distintas realidades de sus colaboradores de manera individual. 

¿A dónde voy con esto? Hace unos días tuve la oportunidad de platicar con @Daniela-Blank, cofundadora y CEO de DAR (De Alto Rendimiento), empresa que tiene como propósito: Transformar la obligación en pasión para liberar el potencial humano. ( Aquí puedes ver la entrevista completa)

Hablamos acerca de los retos del trabajo remoto y de cómo la pandemia las obligó a llevar la dinámica de los talleres presenciales a entornos digitales, también, de WORKSPITALITY, la gran tendencia que la industria del Real Estate y otras están adoptando con un objetivo en común: 

“Crear experiencias centradas en las personas”

Y es aquí donde hay una gran oportunidad, ya que en este experimento global llamado trabajo Híbrido, en palabras de Daniela:

“La mayoría de las empresas NO lo están haciendo con intención [trabajo híbrido]; Este momento es una gran oportunidad para las organizaciones de reinventarse y crear la cultura que quieren crear y no simplemente la cultura que sucede en su organización, porque así es el día a día.” 

Hablando en términos generales, un modelo híbrido, ofrece lo mejor de los dos mundos para trabajadores y empleadores, la facilidad de trabajar desde el hogar y el apoyo de un espacio “formal” de trabajo con los colegas.

Los avances tecnológicos y la gran oferta de espacios de trabajo flexibles son ingredientes ideales para este experimento. Aunado a lo anterior, un estudio realizado por Accenture en mayo de 2021, arrojó que 83% de los entrevistados desea regresar a un esquema híbrido después de la pandemia.  

En contraste, en un estudio más reciente, , 80 % de los líderes de personas dijeron que el esquema híbrido era agotador para los empleados. También, los trabajadores reportaron que el trabajo híbrido era más exigente emocionalmente que el esquema 100% remoto o 100% en oficina. 

Si además tomamos en cuenta que México es el país que más horas trabaja al día según la OCDE, el establecer esquemas híbridos de trabajo sin un plan resulta preocupante y un fracaso.

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Híbrido 2.0 

Entonces ¿Cuál es el ingrediente que está faltando a las organizaciones para implementar el trabajo híbrido?

En la conversación con Daniela, comentamos un punto esencial para la correcta implantación, estamos ante una transición donde las empresas estaban centradas en los accionistas y altos mandos a enfocarnos mucho más en las personas que integran y nutren las organizaciones:

“Este cambio es bueno para todos: accionistas, jefes, clientes; porque el talento humano es la clave de las organizaciones, si quieres organizaciones creativas, tienes que tener personas creativas, si quieres mejores resultados financieros, tienes que tener personas con talento en finanzas, y claro que la tecnología juega un papel importantísimo, pero detrás de todo, siempre hay personas. Enfocarse en la persona, va a ayudar a que todos los resultados sucedan de una manera automática.” 

Entonces, si en tu organización estás intentando implementar un esquema de trabajo híbrido o colaboras en una empresa que lo está haciendo, el primer paso a seguir es preguntar a cada colaborador lo que le funciona a él o ella en específico, entrevístate con ellos, conoce sus necesidades, hobbies, gustos, y algo muy importante, sus rutinas y rituales.

A partir de este punto puedes crear una política de trabajo híbrido que beneficie a la cultura de la empresa, colaboradores, líderes y la retribución económica. Hablo de una política empresarial de trabajo híbrido porque tener claro cada punto y transparencia sobre el tema nos va a ayudar en la gestión y la seguridad de cada colaborador. Se debe definir, por ejemplo, cuando sí y cuando no es trabajo remoto, definir la ubicación del trabajo presencial (en una oficina central o en una sala de juntas de alquiler en un punto medio para todos). Es vital que cada integrante comprenda las reglas.

Definir métricas que permitan evaluar el desempeño y satisfacción de los colaboradores es otro punto importante, recuerda que las organizaciones están evolucionando a centrarse en las personas, siempre fomenta la retroalimentación.

La tecnología debe ser facilitador y no fuente de frustración, debes dotar a tu equipo de las herramientas necesarias para realizar sus actividades, y que cada uno pueda diseñar su día de trabajo de acuerdo a sus tiempos, necesidades individuales y de equipo.   

El poner a su alcance espacios adecuados para ciertas actividades como reuniones creativas, espacios de enfoque libres de distracciones, acceso a servicios complementarios como cuidado de niños, o limpieza de ropa, e incluso espacios de esparcimiento, genera que los equipos se sientan inspirados, motivados y con la autonomía suficiente para crear sus propias rutinas y rituales. 

El trabajo híbrido tiene entre sus objetivos conectar física y digitalmente, si eres líder, te toca trabajar esta parte con tus colaboradores y reforzar la equidad entre la carga presencial y remota, que nadie se sienta aislado o por el contrario, abrumado.

Parece más complicado de lo que realmente es, pero, si como empresa tienes tu propósito claro puedes lograrlo; además ¿Cuándo ser pionero en algo fue fácil? 

Y es así, que ante un mundo híbrido, con tanto cambio tan constante, el autoconocerme, y marcarme un objetivo S.M.A.R.T. (por sus siglas en inglés Específico, Medible, Alcanzable, Relevante y con Tiempo límite.) que a su vez abonara a uno de mis propósitos de vida, que es el estar saludable, me permitió crearme una rutina y ciertos rituales, sin importar mucho los cambios que suceden a diario.  No fue perfecto, hubo algunos días que no entrené, pero logré romper con un récord personal que me había establecido hace mucho tiempo.

¡Ahora, ante esta meta cumplida, no queda más que ver y prepararse para la siguiente!

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Contacto:

Manuel Del Valle, Cofounder y Flow Master de Homework y WFA. Miembro del consejo Directivo de ASEM y AMXCO.

Twitter: @manudvb

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

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