Por: Eugenio Gómez Alatorre y Cecilia Reyes Trejo*

El crecimiento sostenido y la creación de valor son fines de las empresas, que viven por y para las personas. No obstante, varios estudios han mostrado la disminución de valor de las organizaciones debido a la baja participación de las mujeres en actividades económicas remuneradas, ya que afecta la diversidad, productividad, competitividad y la creación de ventajas competitivas. 

De acuerdo con McKinsey Global Institute, si no existieran las brechas de género, podríamos agregar 12 billones de dólares al PIB global, de los cuales México aportaría 800 mil millones, además de generar un impacto profundo en las familias, comunidades, empresas y crecimiento del país.

Reconocer que actualmente en el mundo las mujeres representan la mitad de la población y generan el 37% del Producto Interno Bruto es un indicador de su potencial profesional. Las empresas tienen el poder de impulsar el cambio cultural en los y las colaboradores/as, el cual se podría esparcir en el ámbito familiar y en el social.

Desde el 2015, los Estados Miembros de las Naciones Unidas aprobaron 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible que marcan la agenda para combatir los principales desafíos del mundo actual. El quinto objetivo representa la igualdad de género que busca alcanzarse para el 2030.

Por otro lado, ONU Mujeres y el Pacto Mundial, lanzaron desde el 2010 los Principios de Empoderamiento para la Mujer (WEP´s sus siglas en inglés). Estos Principios ofrecen un cuadro integral de las mejores prácticas que impactan positivamente en la gestión empresarial en temas de igualdad de género y empoderamiento de la mujer, como son:

1.- Establecer el liderazgo corporativo de alto nivel para la igualdad de género.

2.- Tratar a todas las mujeres y hombres de forma justa en el trabajo, respetar y apoyar los derechos humanos y la no discriminación.

3.- Asegurar la salud, seguridad y el bienestar de todos los colaboradores.

4.- Promover la educación, formación y el desarrollo profesional de las mujeres.

5.- Implementar el desarrollo empresarial, cadena de suministro y las prácticas de marketing que empoderen a las mujeres.

6.- Promover la igualdad mediante iniciativas comunitarias y de defensa.

7.- Medir e Informar públicamente el progreso para alcanzar la igualdad de género.

Para poder dar guía y seguimiento de los Principios, se creó una herramienta confidencial y gratuita desarrollada en conjunto por más de 190 empresas, que permite hacer un análisis sobre la situación actual de la organización en temas referentes a la igualdad de género. Esta herramienta se puede consultar aquí: https://weps-gapanalysis.org/

Para hacer cambios que trasciendan, es necesario hacer alianzas multisectoriales con un objetivo en común, de esta manera se podrá llegar a un mayor número de personas de forma más eficiente. Un ejemplo de este caso es la alianza de Bonafont con ONU Mujeres en búsqueda de igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, las acciones que se llevaron a cabo se realizan en un modelo replicable de 3 pilares.

1) Proyecto en campo

a) Programa “Empoderamiento económico de las mujeres”, enfocado a las comunidades afectadas por los sismos de 2017, que busca la reactivación económica a través del fortalecimiento de las capacidades de las mujeres mediante negocios de servicios tales como cuidadoras, lavanderías, guarderías y más.

2) Transformación Interna

a) Implementación de políticas de diversidad e inclusión, logrando más mujeres en posiciones de liderazgo, capacitación en estereotipos de género, aplicación de una política parental global, esquemas de trabajo flexible y la suma de más empresas comprometidas con la igualdad de género 

b) Creación de compromisos concretos y medibles para la alineación de su gestión.

c) Eficiencia, transparencia y rendición de cuentas sustentada en criterios internacionales.

3) Campaña para el cambio cultural

a) Carrera Bonafont con Causa.

b) Lanzamiento de botella edición especial, dónde el 100% de la utilidad neta está siendo destinada a mejorar las vidas de las mujeres mexicanas

Las empresas tienen mucho que ganar con la inclusión de más mujeres en posiciones de liderazgo. La alianza entre Bonafont y ONU Mujeres es un ejemplo que muestra cómo se pueden lograr resultados positivos a través de la colaboración. Necesitamos más casos como este por el bien de las organizaciones y de la sociedad.

Contacto:

*Director del Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección del IPADE.

**Colaboradora del Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección del IPADE.

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

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