Por Jaime Oscar Bustamante Miranda* Aunado a los retos en materia laboral comentados en la edición anterior, un gran pendiente en la materia es la aprobación expedita de la Reforma a la Ley Federal del Trabajo motivada en la modificación al artículo 123 Constitucional, que se promulgó en 2017 y que hasta el momento no se ha cumplimentado. Esta Reforma ya fue presentada en la Cámara de Diputados como consta en la publicación que se hizo en la Gaceta Parlamentaria de dicha Cámara el pasado 22 de diciembre 2018, y seguramente será un tema fundamental en la agenda de trabajo del próximo periodo ordinario de sesiones de nuestro Congreso Federal. Nuestro país está urgido de un cambio de fondo en la legislación laboral que garantice el respeto de todos los derechos de los trabajadores, pues además de que vamos muy atrasados con este cambio -de acuerdo al texto de la reforma constitucional, éste tendría que haber ocurrido desde inicios del año 2018-, la firma del Nuevo Tratado Comercial de Norte América (T-MEC) presiona para lograr los objetivos contenidos en la Reforma. Con el nuevo capítulo laboral del T-MEC, cada parte adquiere el compromiso de cumplir con su legislación nacional y será sujeto al mecanismo de solución de controversias en caso de incumplimiento. Igualmente, se incluye un anexo sobre la implementación de la reforma laboral en México con relación a los contratos colectivos de trabajo. Una vez ratificado el convenio internacional ante la OIT, las medidas contempladas en el mismo entrarán en vigor a los 12 meses y, en caso de que México no cuente con una legislación que establezca con claridad los derechos consagrados en dicha convención internacional, esto podría tener efectos negativos en la certeza que las fuentes de trabajo requieren para fomentar el desarrollo. La reforma laboral debe ir dirigida primeramente a:
  • Ajustar y mejorar reglas que fomenten la libertad sindical y la libertad de participación de los trabajadores en los sindicatos que ellos decidan.
  • Generar condiciones de seguridad jurídica para que los derechos y obligaciones de trabajadores y patrones sean claros, manteniendo equilibrios de sana convivencia laboral.
El proyecto presentado es una iniciativa del nuevo gobierno federal impulsado por la fracción parlamentaria de su partido Morena y consistente con los lineamientos generales de su ideología. Para que su expedición se dé en marco de un ejercicio democrático participativo, debe someterse a un análisis profundo y objetivo de todos los factores relacionados con la política laboral del país, especialmente atendiendo a:
  • Empleadores
  • Cámaras y asociaciones
  • Organizaciones sindicales de trabajadores de todas las tendencias
  • Colegios de abogados
Esto, en seguimiento al amplio sentido social que debe tener dicha legislación y ya que estas instituciones aportan, con su conocimiento técnico objetivo, una visión más integral y de progreso, con equidad y seguridad jurídica. Solo con una participación razonada y abierta por parte de todos los sectores, se podrá lograr una ley laboral que sea garante de los derechos de asociación y de libertad de los trabajadores y de sus sindicatos, en absoluta congruencia con la reciente ratificación que el Senado de nuestro país ha hecho al Convenio 98 de la Organización Internacional del Trabajo. Igualmente, resulta imperativo que se acoten con absoluta claridad los límites de estos derechos y del ejercicio de la huelga como instrumento legal de los Derechos Colectivos, para evitar que estos derechos, malentendidos, se sigan utilizando como instrumentos de facto para la extorsión de fuentes de trabajo legítimas. Los empresarios de este país y todos los sectores del mundo del trabajo, no nos podemos permitir ser meramente espectadores en este proceso de cambio. La trascendencia de estas decisiones nos obliga a participar activamente en el debate, sumando con ideas y propuestas para lograr las mejoras en las Reglas de Juego que nuestro mercado laboral requiere y así garantizar el crecimiento económico sustentable que el país merece. Las empresas que conformamos American Chamber/México, a partir del trabajo de nuestro Comité de Capital Humano y Asuntos Laborales, estamos plenamente comprometidos con esta meta y seguiremos activamente involucrados en este proceso de cambio tan importante. * Vicepresidente de Asuntos Laborales del Comité de Capital Humano y Asuntos Laborales de American Chamber/México.   Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

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