Reuters.- La Fiscalía General de El Salvador ordenó el viernes la captura del expresidente Mauricio Funes por los supuestos delitos de peculado y lavado de dinero por un monto de 351 millones de dólares, y por encubrimiento de varios ilícitos durante su gobierno.

Funes, quien se encuentra asilado en Nicaragua desde septiembre de 2016, es acusado de realizar transacciones irregulares de fondos públicos para el pago de tarjetas de crédito, viajes, remodelación de viviendas, compra de vehículos y servicios hospitalarios. “Se ha girado orden de captura en contra del expresidente Mauricio Funes por delitos relacionados con corrupción en el manejo de fondos públicos”, informó el fiscal general Douglas Meléndez en conferencia de prensa. El ministerio público también ordenó la captura de otras 29 personas, entre ellos dos hijos, familiares y exfuncionarios de su administración que operaban como testaferros. Funes, un experiodista de 58 años, gobernó el empobrecido país centroamericano entre 2009 y 2014 con la bandera del partido izquierdista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) que aún se encuentra en el poder. El exmandatario, quien asegura ser víctima de una persecución política orquestada por sectores empresariales y la derecha, cuestionó las acusaciones en su contra a través de una serie de tuits. “Llama la atención que la Fiscalía General de la República sólo ha hecho incriminaciones sin presentar una sola prueba en mi contra. Hablan de testaferros, pero no demuestran que efectivamente lo son. Hablan de destinos ilícitos de fondos de Casa Presidencial sin presentar pruebas de ello. No tienen registros de nada”, escribió Funes en su cuenta de Twitter.

 

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