Colombia despega / Segunda parte: La mirada del gobierno colombiano se encuentra puesta en México para seducir a sus inversionistas, y el país  ya representa 5% de los flujos de Inversión Extranjera Directa (IED), ¿cuál es la estrategia común para ‘exportar’ inversión?, ¿cuáles son los retos y cómo les hacen frente los empresarios mexicanos?      Colombia ha comenzado a despertar de la pesadilla que le representó más de tres décadas de violencia derivada del narcotráfico. Hoy se libra una nueva batalla en el territorio colombiano, pero esta vez es por atraer inversiones. México está en la mira de las oficinas de inversión de ese país. Cementos Mexicanos (Cemex), Grupo Bimbo, Mexichem y Fomento Económico Mexicano (FEMSA) forman parte del grupo de empresas mexicanas que han resultado seducidas por Colombia y sus encantos para hacer negocios. “Al venir a Colombia recibimos mucho apoyo de parte de entidades gubernamentales como Proexport y fue un proceso de trámites muy rápido para abrir el negocio. Ésa es una ventaja de este país”, dice Enrique Rojas Tecalco, gerente general de Inversinox, firma mexicana que distribuye acero inoxidable en territorio colombiano. El interés de los empresarios mexicanos es evidente. Durante el primer trimestre de 2014, México representó 5% de los flujos de Inversión Extranjera Directa (IED) en el país latinoamericano, mientras que Perú aportó 2%, participaciones que los convierten en los dos principales inversores de la región en Colombia. Hace tres semanas, el Banco Mundial consideró a Colombia como el país con el mejor ambiente para hacer negocios en América Latina, como parte de su reporte Doing Business. Ésta es una invitación que tal vez lleve a otras firmas mexicanas a aterrizar en Sudamérica. Tan sólo en Bogotá se encuentran instaladas más de 27 empresas de origen mexicano y se espera que nuevas compañías aterricen en otras ciudades colombianas. “Los cambios en la economía colombiana denotan el trabajo que las autoridades han hecho en términos de seguridad, después de que por varias décadas habían afectado al país”, asegura Leticia Armenta Fraire, directora del Centro de Análisis Económico del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), en el campus Ciudad de México. La investigadora no echa las campanas al vuelo. Incorporar a la población joven de Colombia de entre 14 y 28 años en la economía es uno de los principales retos, así como mantener un clima de seguridad que puede revertirse en cualquier momento.   Colombia 22   La conquista Enrique Rojas Tecalco recibió hace dos años una de las misiones más importantes de su empresa: encontrar un nuevo país para extender sus operaciones. Panamá y Perú giraban en la mente del empresario mexicano. Pero Colombia conquistó el mapa de sus inversiones. El gerente general de Inversinox cumplió su primer año operando en Colombia, después de haber adquirido la firma colombiana Invertinox. Invesinox es una de las 25 empresas subsidiarias de Grupo Industrial Mexicano, que se ubica en San Luis Potosí y la Ciudad de México. En México ocupan el primer lugar en la distribución de acero inoxidable, dice el directivo, la cual se sustenta en la distribución de 40,000 toneladas anuales de acero, cantidad que es equivalente al consumo total del mercado colombiano. Inversinox es la única empresa extranjera que comercializa acero en tierras colombianas. No sólo Enrique ha visto las oportunidades que nacen en Colombia, ya que otras empresas han demostrado su confianza. La Inversión Extranjera Directa de Colombia ha ido en aumento durante los últimos tres años: en 2013, el país captó 16,354 millones de dólares (mdd), lo que representa un crecimiento de 8.1% en comparación con un año previó, en que registró 15,119 mdd. De 2004 a 2013, la IED se ha incrementado más de nueve veces. Este año, Cemex anunció a través de su subsidiaria en Latinoamérica una inversión por 340 mdd, en Medellín, con la cual planea incrementar su capacidad de producción de 4.5 millones a 5.5 millones de toneladas de cemento. En el periodo de 2012 al primer trimestre de este año, los principales países emisores de capital a Colombia fueron Estados Unidos, Panamá e Inglaterra, mientras que tan sólo en los primeros tres meses de 2014 Estados Unidos, España y Suiza concentraron el 34% de los flujos de efectivo. La consolidación de México como primer inversor de Latinoamérica en Colombia durante los primeros meses de este año es un aliciente que motiva a las autoridades de la nación sudamericana. Por ahora,  Enrique Rojas proyecta que en cinco años Inversinox ocupe entre 15 y 20% del mercado de distribución de acero en Colombia, a pesar de que hoy tan sólo posee 2%. De ese tamaño es la oportunidad que vislumbran en ese país. En 2015, Inversinox estaría por cerrar las negociaciones para adquirir dos firmas distribuidoras de acero, que se han acercado a los empresarios mexicanos con la mirada puesta en las oportunidades que la firma tiene. Sin embargo, el empresario pisa de forma cautelosa. Hace apenas tres semanas, una de sus unidades de reparto fue incendiada en las calles de Medellín, por lo que considera la seguridad un pendiente peligroso de un país que quiere abrirse al mundo. “Los problemas sociales requieren de un tiempo mucho mayor; por otro lado, todo es susceptible de revertirse, ya que siempre se encuentran latentes los riesgos”, dice Armenta. Foto: Proexport.   Los pendientes  El 28 de abril de 2011, una nueva esperanza nació para el crecimiento económico de Colombia dentro de la región. Ese día se creó la Alianza del Pacífico, una iniciativa de integración regional que se encuentra conformada por Chile, Colombia, Perú y México. “El comercio internacional da la oportunidad de ampliar el mercado para las empresas que tienen un nivel de competitividad que les permita acceder a otras regiones”, comenta Leticia Armenta. Pero no basta con abrirse a otras economías. Los jóvenes de entre 14 y 28 años de edad constituyen 32.5% de la población económicamente activa, y sólo 49% están empleados. “Se requieren oportunidades de empleo para este tipo de personas, y es un avance social muy importante, ya que los jóvenes serán la base económica en los próximos cinco años”, dice Leticia Armenta, quien ve oportunidades de desarrollo en elevar los niveles educativos. Sólo 13% de la población colombiana cuenta con estudios básicos, 31% con secundaria incompleta, y 44% tiene el mínimo nivel educativo. La tasa de desempleo alcanza 15.6% en 2014, por lo que aún hay trabajo pendiente. Apenas 11% de las exportaciones colombianas son manufacturas, y la mayor parte corresponden a minería y petróleo, por lo que hace falta diversificar el portafolio “Una oportunidad para las empresas es impulsar la transformación de las materias primas, y que el ciclo económico exige nuevos productos.” En 10 años, Colombia ha logrado bajar los niveles de pobreza en prácticamente 7%, al pasar de 17.7% en 2002 al 10.4% durante 2012. Colombia se ha convertido para Inversinox en la puerta para abrir nuevas operaciones en Perú, Chile, Argentina y Panamá para exportar, así como establecerse con operaciones independientes en cada país. “Existen posibilidades de negocio, porque la economía mexicana tiene productos que pueden ser muy competitivos en Colombia por el avance que se tiene en los procesos de industrialización”, explica la especialista del ITESM. Para Enrique Rojas, los próximos años sólo requieren de paciencia para concretar los planes de negocio de Inversinox y confirmar las expectativas favorables que espera no se esfumen: “Las oportunidades las vemos aquí en Colombia, y a pesar de los inconvenientes que pudieran existir no pensamos abandonar este país.”

 

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