Construir una empresa de cero y desarrollar la tecnología necesaria para llevarla a cabo es un ejemplo inspirador. Swarovski puede insuflar vida a una industria, la de la moda, que necesita ampliar sus horizontes.
Quién iba a pensar en 1895 que los cristales valdrían su peso en oro. Daniel Swarovski decidió, en medio del frío del Tirol, Austria, que debía inventar una máquina para el tallado y pulido de los cristales para bisutería. «Desde sus comienzos los cristales Swarovski revolucionaron el mundo de la moda», señaló Gregorio Jiménez —quien es, desde marzo de 2012, director de la marca en nuestro país—, durante la última presentación de la colección. Y no sólo moda. Hemos visto ese brillo cegador en iluminación, arquitectura e interiorismo.
Su tipo de negocio sigue siendo familiar y hoy está dirigido por la quinta generación. Algo que pocos saben es que la empresa se divide en dos áreas de negocio: una dedicada a la producción y venta de elementos de cristal al sector industrial y la otra a la creación de productos de diseño. Las colecciones evolucionan cada temporada con técnicas patentadas que la marca ha desarrollado para expandirse. Pero buscan nuevos talentos que abrillanten las facetas de sus cristales.
Como parte de su patrocinio del programa Parsons bfa (Bachelor of Fine Art), Swarovski alentó a los estudiantes de último año a descargar Crystal Collection App y familiarizarse con el vasto surtido de la
maison.
La moda sí importa a la hora de hacer brillar los balances financieros anuales.
Los más vendidos
Las tres piezas más vendidas de la marca a nivel mundial tienen un precio de 5,499 pesos. Son el reloj Citra Sphere White (sobre estas líneas), el collar Bound (arriba) y el reloj Crystalline White (más arriba). ¿La figura? Cenicienta, una edición limitada de 2015 con un precio de 8,390 pesos.
Algunas marcas que utilizan Swarovski:
- Salvatore
- Ferragamo
- UNOde50
- Porcelanosa
- Lancôme
- La Perla
- Pepe Jeans
- Hugo Boss
- Escada
- Stuart Weitzman
- Samsung
